Óscar Enrique Vidal, de 80 años de edad, conocido en La Virginia por recorrer incansablemente las calles vendiendo rifas y boletas, perdió l...
Óscar Enrique Vidal, de 80 años de edad, conocido en La Virginia por recorrer incansablemente las calles vendiendo rifas y boletas, perdió la vida en las últimas horas, ya que no se pudo recuperar de las graves heridas sufridas en un accidente de tránsito que sufrió hace dos meses.
¿Qué pasó?
Vidal, quien era querido por la comunidad por su carácter amigable, sufrió un accidente el 31 de agosto a las 4:00 de la tarde. Pese a su edad, Vidal era un hombre lleno de vitalidad y autosuficiente. Ese salió de su casa a trabajar y, minutos después, una tractomula lo embistió mientras estaba sentado cerca de una estación de gasolina en el barrio Libertadores; según versiones preliminares, el conductor del pesado vehículo no lo vio y lo arrolló.
Don Óscar fue auxiliado por organismos de socorro y trasladado al Hospital de La Virginia. Sin embargo, debido a la gravedad de sus heridas, que incluyeron la destrucción de una de sus piernas, tuvo que ser remitido al Hospital Universitario San Jorge. A pesar de los esfuerzos médicos, y tras ser intervenido quirúrgicamente, Vidal falleció a las 8:30 p.m. del domingo 17 de noviembre. Su partida dejó gran tristeza en la comunidad.
El grupo de criminalística de la Sijín de Pereira realizó la inspección técnica del cuerpo, que fue llevado a Medicina Legal para la respectiva necropsia. Ayer, sus familiares reclamaron los restos de Vidal y los trasladaron al municipio de Anserma, Caldas, para realizar sus exequias, cumpliendo con su último deseo de ser sepultado junto a su esposa, quien ya descansaba en ese lugar.
Un gran hombre
Vidal era un hombre reconocido por su amabilidad, alegría y capacidad para relacionarse con todos. Trabajador incansable, buen padre, vendedor y vecino ejemplar, deja un profundo vacío en la comunidad que lo admiraba y respetaba.
Su vida
Óscar Enrique vivía solo en este barrio, era viudo y padre de cuatro hijos, uno de los cuales reside en Bogotá. A pesar de su edad, mantenía una vida activa y era muy querido por su amabilidad, carisma y espíritu trabajador.
¿Qué pasó?
Vidal, quien era querido por la comunidad por su carácter amigable, sufrió un accidente el 31 de agosto a las 4:00 de la tarde. Pese a su edad, Vidal era un hombre lleno de vitalidad y autosuficiente. Ese salió de su casa a trabajar y, minutos después, una tractomula lo embistió mientras estaba sentado cerca de una estación de gasolina en el barrio Libertadores; según versiones preliminares, el conductor del pesado vehículo no lo vio y lo arrolló.
Don Óscar fue auxiliado por organismos de socorro y trasladado al Hospital de La Virginia. Sin embargo, debido a la gravedad de sus heridas, que incluyeron la destrucción de una de sus piernas, tuvo que ser remitido al Hospital Universitario San Jorge. A pesar de los esfuerzos médicos, y tras ser intervenido quirúrgicamente, Vidal falleció a las 8:30 p.m. del domingo 17 de noviembre. Su partida dejó gran tristeza en la comunidad.
El grupo de criminalística de la Sijín de Pereira realizó la inspección técnica del cuerpo, que fue llevado a Medicina Legal para la respectiva necropsia. Ayer, sus familiares reclamaron los restos de Vidal y los trasladaron al municipio de Anserma, Caldas, para realizar sus exequias, cumpliendo con su último deseo de ser sepultado junto a su esposa, quien ya descansaba en ese lugar.
Un gran hombre
Vidal era un hombre reconocido por su amabilidad, alegría y capacidad para relacionarse con todos. Trabajador incansable, buen padre, vendedor y vecino ejemplar, deja un profundo vacío en la comunidad que lo admiraba y respetaba.
Su vida
Óscar Enrique vivía solo en este barrio, era viudo y padre de cuatro hijos, uno de los cuales reside en Bogotá. A pesar de su edad, mantenía una vida activa y era muy querido por su amabilidad, carisma y espíritu trabajador.
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