María Gilma González Patiño, madre de Jorge Enrique Quiceno González, ex candidato a la Alcaldía de Santa Rosa de Cabal por el partido Nueva...
María Gilma González Patiño, madre de Jorge Enrique Quiceno González, ex candidato a la Alcaldía de Santa Rosa de Cabal por el partido Nueva Fuerza Democrática, falleció como consecuencia de un accidente de tránsito. El trágico suceso dejó a sus familiares y amigos sumidos en la tristeza.
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¿Qué pasó?
El suceso ocurrió en la tarde del jueves 1 de agosto en la carrera 23 con calle 27, en el barrio La Hermosa de Santa Rosa de Cabal. Doña María Gilma, de 83 años, regresaba a su hogar después de una visita al centro de la ciudad. Al descender de una buseta de servicio público y cruzar la calle, fue atropellada por un microbús cuyo conductor, según las primeras versiones, estaba descargando a un pasajero y al iniciar la marcha no se percató de que la señora estaba cruzando.
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La señora González Patiño sufrió un golpe en la cabeza y fue trasladada de inmediato al hospital local, donde le diagnosticaron un trauma craneoencefálico severo y una hemorragia cerebral. Debido a la gravedad de sus lesiones, fue remitida a la clínica San Rafael de Pereira e ingresada a la unidad de cuidados intensivos.
María Gilma era una figura muy querida en su comunidad. La noticia de su accidente causó conmoción entre los vecinos del barrio La Hermosa, quienes rápidamente informaron a sus familiares. Jorge Enrique Quiceno, su hijo, acudió al Hospital San Vicente de Paúl, pero lamentablemente su madre ya estaba inconsciente cuando llegó y fue trasladada de urgencia a Pereira.
A pesar de los esfuerzos médicos, las oraciones y las esperanzas de sus seres queridos, María Gilma González Patiño falleció a las 8:00 p.m. del viernes 9 de agosto. El grupo de criminalística de la Sijín de Pereira realizó la inspección técnica del cuerpo, que fue trasladado a Medicina Legal para la correspondiente necropsia.
Una gran mujer
Jorge Enrique Quiceno expresó con profundo dolor la pérdida de su madre, a quien describió como una mujer llena de vitalidad e independencia. "Ella era muy católica, iba a misa todos los días y era una excelente madre, dedicada a su hogar y familia. Dependía de sí misma, no le gustaba que la acompañarán en sus diligencias; prefería hacerlas sola. Hoy estamos llenos de tristeza, pero también muy agradecidos por la gran madre y mujer que fue", manifestó Quiceno.
Su vida
María Gilma, originaria del municipio de Aguadas, Caldas, se había radicado en Santa Rosa de Cabal hace muchos años, donde vivió la mayor parte de su vida. Residía en el barrio La Hermosa desde hace aproximadamente 15 años, compartiendo su hogar con uno de sus cinco hijos.
Las exequias
El cuerpo de doña Gilma fue velado a partir de las 6:00 de la tarde del sábado 10 de agosto en la funeraria Los Jazmines. La eucaristía en su honor se llevará a cabo hoy domingo a las 3:00 de la tarde en la parroquia Santísima Trinidad, ubicada en el barrio La Hermosa, y sus exequias se realizarán en el Parque Cementerio Los Jazmines, en el municipio de Santa Rosa.
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¿Qué pasó?
El suceso ocurrió en la tarde del jueves 1 de agosto en la carrera 23 con calle 27, en el barrio La Hermosa de Santa Rosa de Cabal. Doña María Gilma, de 83 años, regresaba a su hogar después de una visita al centro de la ciudad. Al descender de una buseta de servicio público y cruzar la calle, fue atropellada por un microbús cuyo conductor, según las primeras versiones, estaba descargando a un pasajero y al iniciar la marcha no se percató de que la señora estaba cruzando.
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La señora González Patiño sufrió un golpe en la cabeza y fue trasladada de inmediato al hospital local, donde le diagnosticaron un trauma craneoencefálico severo y una hemorragia cerebral. Debido a la gravedad de sus lesiones, fue remitida a la clínica San Rafael de Pereira e ingresada a la unidad de cuidados intensivos.
María Gilma era una figura muy querida en su comunidad. La noticia de su accidente causó conmoción entre los vecinos del barrio La Hermosa, quienes rápidamente informaron a sus familiares. Jorge Enrique Quiceno, su hijo, acudió al Hospital San Vicente de Paúl, pero lamentablemente su madre ya estaba inconsciente cuando llegó y fue trasladada de urgencia a Pereira.
A pesar de los esfuerzos médicos, las oraciones y las esperanzas de sus seres queridos, María Gilma González Patiño falleció a las 8:00 p.m. del viernes 9 de agosto. El grupo de criminalística de la Sijín de Pereira realizó la inspección técnica del cuerpo, que fue trasladado a Medicina Legal para la correspondiente necropsia.
Una gran mujer
Jorge Enrique Quiceno expresó con profundo dolor la pérdida de su madre, a quien describió como una mujer llena de vitalidad e independencia. "Ella era muy católica, iba a misa todos los días y era una excelente madre, dedicada a su hogar y familia. Dependía de sí misma, no le gustaba que la acompañarán en sus diligencias; prefería hacerlas sola. Hoy estamos llenos de tristeza, pero también muy agradecidos por la gran madre y mujer que fue", manifestó Quiceno.
Su vida
María Gilma, originaria del municipio de Aguadas, Caldas, se había radicado en Santa Rosa de Cabal hace muchos años, donde vivió la mayor parte de su vida. Residía en el barrio La Hermosa desde hace aproximadamente 15 años, compartiendo su hogar con uno de sus cinco hijos.
Las exequias
El cuerpo de doña Gilma fue velado a partir de las 6:00 de la tarde del sábado 10 de agosto en la funeraria Los Jazmines. La eucaristía en su honor se llevará a cabo hoy domingo a las 3:00 de la tarde en la parroquia Santísima Trinidad, ubicada en el barrio La Hermosa, y sus exequias se realizarán en el Parque Cementerio Los Jazmines, en el municipio de Santa Rosa.
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