Le dieron dos disparo en la cabeza en el barrio El Rocío
En la mañana de ayer fue asesinado Adrián Arely Castaño Casadiego, un joven de 17 años, que al parecer ya la tenía sentenciada. El ataque fue a bala en el barrio El Rocío Bajo de Pereira.
Un ciudadano llegó al CAI Poblado y les manifestó a los uniformados que había una persona sin vida en un andén, cuando llegaron al lugar verificaron que efectivamente se trataba de un homicidio y procedieron a acordonar la zona.
Unidades de la Sijín de Pereira realizaron la inspección técnica al cuerpo, donde encontraron un proyectil calibre 38 y un celular, el cadáver fue trasladado a Medicina Legal para su respectiva necropsia.
Los padres de Adrián escucharon los disparos, pensaron en su hijo y salieron a ver qué había pasado y a 100 metros aproximadamente se encontraron con su ser amado muerto.
A raíz de esto al parecer le habían advertido que si seguía con esos comportamientos ilícitos, no respondían por lo que pudiera ocurrirle.
¿Qué pasó?
Los hechos se registraron a las 5:30 de la mañana frente a la casa 139A. Un sujeto desconocido le disparó al adolescente en dos oportunidades en la cabeza y en el abdomen, el deceso se produjo de forma inmediata.Un ciudadano llegó al CAI Poblado y les manifestó a los uniformados que había una persona sin vida en un andén, cuando llegaron al lugar verificaron que efectivamente se trataba de un homicidio y procedieron a acordonar la zona.
Unidades de la Sijín de Pereira realizaron la inspección técnica al cuerpo, donde encontraron un proyectil calibre 38 y un celular, el cadáver fue trasladado a Medicina Legal para su respectiva necropsia.
Los padres de Adrián escucharon los disparos, pensaron en su hijo y salieron a ver qué había pasado y a 100 metros aproximadamente se encontraron con su ser amado muerto.
Lo habían amenazado
Según manifestaron las personas del sector, el hoy occiso ya no era muy querido en el barrio ya que al parecer estaba cometiendo hurtos a la gente del sector, robando celulares, a taxistas, a carros transportadores y carros repartidores de productos, además era consumidor de estupefacientes.A raíz de esto al parecer le habían advertido que si seguía con esos comportamientos ilícitos, no respondían por lo que pudiera ocurrirle.
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