Cada vez es más común en la capital risaraldense que jóvenes aparezcan asesinados sin conocerse las causas. Al parecer esta nueva víctima ha...
Cada vez es más común en la capital risaraldense que jóvenes aparezcan asesinados sin conocerse las causas. Al parecer esta nueva víctima habría sido atacada en la madrugada del lunes, pues la comunidad asegura haber escuchado detonaciones, pero a esa hora ¿quién se iba a asomar? nadie.

Es incierto el momento exacto en que lo asesinaron, pero todo indica que habría ocurrido en la madrugada. La comunidad afirma que alcanzaron a escuchar disparos, aunque nadie se atrevió a salir. Presuntamente, Mateo habría sido llevado bajo engaños, con la clásica trampa de los sicarios, “vamos a dar una vuelta, acompáñeme a hacer algo”. Es la misma modalidad que suelen usar cuando la víctima es conocida. El pelado recibió varios disparos, todos directamente en la cabeza, lo que confirma que el ataque fue certero y sin margen de error.
Quién dio el pitazo
Los trabajadores del sector que llegaron temprano se toparon con el cuerpo tendido y fueron ellos quienes dieron aviso a la línea 123. La patrulla 16 acudió al sitio y verificó que no había signos vitales.
¿Quién era?
Mateo Andrés Molina Morales, nacido el 5 de octubre de 2002, natural de Pereira, cedulado en Ansermanuevo, Valle, de contextura delgada, trigueño, cabello negro. Vestía camiseta gris, jeans azules y zapatillas negras. En redes sociales lo recuerdan como un joven alegre, siempre con una sonrisa.
La modalidad
Presuntamente fue víctima de la estrategia usada por los sicarios cuando conocen a la persona, invitarla a salir con cualquier excusa y terminar llevándola al lugar donde la ejecutan sin piedad.
Antecedentes
Registra anotaciones por estupefacientes en 2023. Por ahora, las autoridades no descartan ninguna hipótesis y los motivos del crimen son materia de investigación.
La cifra que alarma
Con este caso ya son 166 homicidios en Pereira en lo corrido del 2025. Un número que preocupa y que demuestra que, pese a los esfuerzos de la Policía con burbujas de inteligencia y diferentes operativos, este es el único delito que no ha logrado bajar en la ciudad. Todos los días la capital risaraldense amanece con un muerto más.
El levantamiento
El grupo de criminalística del CTI de la fiscalía se hizo presente, adelantó la inspección técnica, recogió vainillas y entrevistó a los pocos curiosos. Una vez más, quedó en evidencia la falta de cámaras de seguridad en la zona, un detalle que juega a favor de los asesinos. El cuerpo fue levantado y trasladado a Medicina Legal para la necropsia de rigor.

¿Qué pasó?
La mañana del lunes 8 de septiembre, el barrio Samaria 2 frente a la manzana 47, amaneció con otro crimen más para la larga lista de la ciudad. En la zona boscosa del parque La Avioneta, justo detrás de la construcción de la nueva caseta comunal, fue encontrado el cuerpo sin vida de un joven. Tenía apenas 22 años y las balas lo sorprendieron cuando menos lo esperaba.
La mañana del lunes 8 de septiembre, el barrio Samaria 2 frente a la manzana 47, amaneció con otro crimen más para la larga lista de la ciudad. En la zona boscosa del parque La Avioneta, justo detrás de la construcción de la nueva caseta comunal, fue encontrado el cuerpo sin vida de un joven. Tenía apenas 22 años y las balas lo sorprendieron cuando menos lo esperaba.
Es incierto el momento exacto en que lo asesinaron, pero todo indica que habría ocurrido en la madrugada. La comunidad afirma que alcanzaron a escuchar disparos, aunque nadie se atrevió a salir. Presuntamente, Mateo habría sido llevado bajo engaños, con la clásica trampa de los sicarios, “vamos a dar una vuelta, acompáñeme a hacer algo”. Es la misma modalidad que suelen usar cuando la víctima es conocida. El pelado recibió varios disparos, todos directamente en la cabeza, lo que confirma que el ataque fue certero y sin margen de error.
Quién dio el pitazo
Los trabajadores del sector que llegaron temprano se toparon con el cuerpo tendido y fueron ellos quienes dieron aviso a la línea 123. La patrulla 16 acudió al sitio y verificó que no había signos vitales.
¿Quién era?
Mateo Andrés Molina Morales, nacido el 5 de octubre de 2002, natural de Pereira, cedulado en Ansermanuevo, Valle, de contextura delgada, trigueño, cabello negro. Vestía camiseta gris, jeans azules y zapatillas negras. En redes sociales lo recuerdan como un joven alegre, siempre con una sonrisa.
La modalidad
Presuntamente fue víctima de la estrategia usada por los sicarios cuando conocen a la persona, invitarla a salir con cualquier excusa y terminar llevándola al lugar donde la ejecutan sin piedad.
Antecedentes
Registra anotaciones por estupefacientes en 2023. Por ahora, las autoridades no descartan ninguna hipótesis y los motivos del crimen son materia de investigación.
La cifra que alarma
Con este caso ya son 166 homicidios en Pereira en lo corrido del 2025. Un número que preocupa y que demuestra que, pese a los esfuerzos de la Policía con burbujas de inteligencia y diferentes operativos, este es el único delito que no ha logrado bajar en la ciudad. Todos los días la capital risaraldense amanece con un muerto más.
El levantamiento
El grupo de criminalística del CTI de la fiscalía se hizo presente, adelantó la inspección técnica, recogió vainillas y entrevistó a los pocos curiosos. Una vez más, quedó en evidencia la falta de cámaras de seguridad en la zona, un detalle que juega a favor de los asesinos. El cuerpo fue levantado y trasladado a Medicina Legal para la necropsia de rigor.
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