Era domingo por la mañana cuando la alegría de una reunión familiar se convirtió en dolor. La tragedia ocurrió en una finca del corregimient...
Era domingo por la mañana cuando la alegría de una reunión familiar se convirtió en dolor. La tragedia ocurrió en una finca del corregimiento de Zaragoza, Cartago Valle, que la familia de Luis Alfonso Toro Castaño, un comerciante de 59 años, había alquilado para pasar el fin de semana.
Desde el sábado en la tarde, todo era celebración, nadie imaginó que al amanecer las cosas cambiarían. Luis Alfonso se acercó a la piscina y antes de lanzarse al agua, resbaló y se golpeó fuertemente en la cabeza contra uno de los bordes.
El impacto le provocó un trauma severo, inmediatamente fue trasladado por sus familiares al hospital de Cartago, donde los médicos hicieron todo lo posible para salvarle la vida, pero el golpe había sido fulminante, al pasar un rato confirmaron que había perdido la vida.
Al hospital llegó el CTI para realizar la inspección técnica del cadáver y trasladarlo a Medicina Legal. Sus familiares no se explican cómo un paseo familiar terminó dejando un vacío tan grande.
Desde el sábado en la tarde, todo era celebración, nadie imaginó que al amanecer las cosas cambiarían. Luis Alfonso se acercó a la piscina y antes de lanzarse al agua, resbaló y se golpeó fuertemente en la cabeza contra uno de los bordes.
El impacto le provocó un trauma severo, inmediatamente fue trasladado por sus familiares al hospital de Cartago, donde los médicos hicieron todo lo posible para salvarle la vida, pero el golpe había sido fulminante, al pasar un rato confirmaron que había perdido la vida.
Al hospital llegó el CTI para realizar la inspección técnica del cadáver y trasladarlo a Medicina Legal. Sus familiares no se explican cómo un paseo familiar terminó dejando un vacío tan grande.
COMENTARIOS