Tremendo golpe dieron las autoridades al capturar a un presunto extorsionista que, al parecer, venía azotando a comerciantes del municipio c...
Tremendo golpe dieron las autoridades al capturar a un presunto extorsionista que, al parecer, venía azotando a comerciantes del municipio con cobros ilegales para dejarlos trabajar tranquilos.
Se trata de Bladimir Padilla Marín, un sujeto de 28 años conocido con el alias de Blacho, quien fue capturado en flagrancia el 9 de abril mientras, supuestamente, recibía 1 millón 500 mil pesos producto de una extorsión en pleno casco urbano de La Victoria.
La captura
El operativo fue adelantado por unidades del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) y del Gaula Militar, quienes ya venían siguiéndole los pasos al hombre, tras recibir varias denuncias por las constantes amenazas y exigencias económicas que hacía a los comerciantes de la zona. Durante la diligencia judicial, a alias Blacho le incautaron una motocicleta, un celular y el dinero en efectivo que, presuntamente, acababa de recibir como parte del chantaje.
No aceptó
La Fiscalía General de la Nación le imputó el delito de extorsión, pero el procesado no aceptó el cargo, y por decisión de un juez, fue enviado a la cárcel con medida de aseguramiento preventiva mientras avanza la investigación en su contra.
Se trata de Bladimir Padilla Marín, un sujeto de 28 años conocido con el alias de Blacho, quien fue capturado en flagrancia el 9 de abril mientras, supuestamente, recibía 1 millón 500 mil pesos producto de una extorsión en pleno casco urbano de La Victoria.
La captura
El operativo fue adelantado por unidades del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) y del Gaula Militar, quienes ya venían siguiéndole los pasos al hombre, tras recibir varias denuncias por las constantes amenazas y exigencias económicas que hacía a los comerciantes de la zona. Durante la diligencia judicial, a alias Blacho le incautaron una motocicleta, un celular y el dinero en efectivo que, presuntamente, acababa de recibir como parte del chantaje.
No aceptó
La Fiscalía General de la Nación le imputó el delito de extorsión, pero el procesado no aceptó el cargo, y por decisión de un juez, fue enviado a la cárcel con medida de aseguramiento preventiva mientras avanza la investigación en su contra.
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