La Procuraduría General de la Nación confirmó la destitución e inhabilidad general por 10 años y un mes a Mauricio Morales Guapacha, un ex p...
La Procuraduría General de la Nación confirmó la destitución e inhabilidad general por 10 años y un mes a Mauricio Morales Guapacha, un ex patrullero de la Policía Nacional, al comprobarse que, sin autorización, entregó elementos prohibidos a una persona privada de la libertad que estaba bajo custodia de la Policía Metropolitana de Pereira.

Los hechos
El hecho investigado tuvo lugar en Pereira el 11 de noviembre de 2023, cuando Morales Guapacha, quien estaba adscrito a la Sijín de la Policía Metropolitana de Pereira, entregó artículos no permitidos a un detenido, incumpliendo con los protocolos y normativas de la institución.
Este comportamiento llevó a la Fiscalía General de la Nación a abrir una investigación adicional, ya que se sospechaba que el patrullero pudo haber recibido dinero a cambio de la entrega de dichos elementos. Esto derivó en la imputación de delitos como cohecho propio y cohecho por dar u ofrecer, involucrando no solo a Morales Guapacha, sino también a civiles, entre ellos algunos internos que habrían recibido los objetos ilícitos.
El 30 de enero de 2024, Morales Guapacha fue enviado a un centro carcelario con medida de detención preventiva, mientras avanza su proceso judicial por los delitos de desobediencia y abandono del puesto. El patrullero aceptó cargos por desobediencia.
Otro patrullero implicado
De igual manera, en el fallo, la Procuraduría declaró probado y no desvirtuado el cargo endilgado al patrullero Jeison Jesús Ruiz Vargas, por el abandono del puesto que tenía como custodio de la celda en la que su compañero hizo entrega de los elementos en las instalaciones del centro carcelario en el que ocurrieron los hechos descritos.
La entidad resaltó que en su caso accedió a la solicitud de alejarse de la celda a la que se llevaron los objetos para atender una conversación con otro patrullero, lo que iba en contravía de los deberes que estaba obligado a cumplir, actuando de forma negligente y descuidada. En su caso, la falta se calificó como grave a título de culpa grave.
Fallo en segunda instancia
Tras revisar las pruebas y argumentos de la defensa, la Procuraduría Regional de Juzgamiento de Risaralda emitió en segunda instancia que Morales Guapacha actuó con dolo y calificó su conducta como una falta gravísima. Por ello, ratificó su destitución de 10 años y un mes para ejercer cargos públicos.

Los hechos
El hecho investigado tuvo lugar en Pereira el 11 de noviembre de 2023, cuando Morales Guapacha, quien estaba adscrito a la Sijín de la Policía Metropolitana de Pereira, entregó artículos no permitidos a un detenido, incumpliendo con los protocolos y normativas de la institución.
Este comportamiento llevó a la Fiscalía General de la Nación a abrir una investigación adicional, ya que se sospechaba que el patrullero pudo haber recibido dinero a cambio de la entrega de dichos elementos. Esto derivó en la imputación de delitos como cohecho propio y cohecho por dar u ofrecer, involucrando no solo a Morales Guapacha, sino también a civiles, entre ellos algunos internos que habrían recibido los objetos ilícitos.
El 30 de enero de 2024, Morales Guapacha fue enviado a un centro carcelario con medida de detención preventiva, mientras avanza su proceso judicial por los delitos de desobediencia y abandono del puesto. El patrullero aceptó cargos por desobediencia.
Otro patrullero implicado
De igual manera, en el fallo, la Procuraduría declaró probado y no desvirtuado el cargo endilgado al patrullero Jeison Jesús Ruiz Vargas, por el abandono del puesto que tenía como custodio de la celda en la que su compañero hizo entrega de los elementos en las instalaciones del centro carcelario en el que ocurrieron los hechos descritos.
La entidad resaltó que en su caso accedió a la solicitud de alejarse de la celda a la que se llevaron los objetos para atender una conversación con otro patrullero, lo que iba en contravía de los deberes que estaba obligado a cumplir, actuando de forma negligente y descuidada. En su caso, la falta se calificó como grave a título de culpa grave.
Fallo en segunda instancia
Tras revisar las pruebas y argumentos de la defensa, la Procuraduría Regional de Juzgamiento de Risaralda emitió en segunda instancia que Morales Guapacha actuó con dolo y calificó su conducta como una falta gravísima. Por ello, ratificó su destitución de 10 años y un mes para ejercer cargos públicos.
COMENTARIOS