Un hecho desgarrador y de gran conmoción se registró en el municipio de Cartago, donde fueron asesinados a balazos Alba Lucía Rivera, de 45 ...
Un hecho desgarrador y de gran conmoción se registró en el municipio de Cartago, donde fueron asesinados a balazos Alba Lucía Rivera, de 45 años de edad, y su hijo, Juan David Posada Rivera, de tan solo 14 años, en plena vía pública. La noticia ha dejado a su familia en el corregimiento de Puerto Caldas, Pereira, sumida en el dolor y la tristeza más profunda, al ver cómo la violencia arrebata la vida de dos seres queridos de manera cruel e injusta.
¿Qué pasó?
A las 8:30 de la noche del sábado 30 de noviembre, en la carrera 9 entre calles 8 y 9 del barrio San Nicolás, se registró un violento ataque que dejó a madre e hijo gravemente heridos. La mujer, de 45 años, se encontraba trabajando en su carrito de tintos, que ella misma había acondicionado, acompañada de su hijo de 14 años, cuando dos sujetos llegaron sin mediar palabra y abrieron fuego contra ellos. Ambos quedaron tendidos en la calle, gravemente heridos, mientras que los agresores huyeron del lugar.
La comunidad del sector, al escuchar los disparos, no prestó mucha atención, ya que pensaron que se trataba de pólvora o alguna alborada dando inicio a diciembre. Sin embargo, las personas que se encontraban dentro de un establecimiento público salieron al escuchar el estruendo y fueron testigos de cómo un taxi arrancaba rápidamente del lugar, lo que hace suponer que los sicarios se desplazaban en ese vehículo. El ataque dejó a madre e hijo gravemente heridos, generando gran preocupación y conmoción en la zona.
Las autoridades policiales fueron alertadas de inmediato sobre el ataque y, al llegar al lugar, encontraron los cuerpos sin vida de Alba Lucía y su hijo Juan David. Ambos habían sido alcanzados por los disparos y ya no presentaban signos vitales. Las autoridades acordonaron el área para llevar a cabo la inspección judicial correspondiente.
La noticia del doble homicidio se propagó rápidamente por todo el barrio San Nicolás, causando consternación e indignación entre los vecinos, quienes salieron a observar la inspección técnica de los cuerpos. Con voces llenas de tristeza y rabia, la comunidad expresaba su desolación ante el crimen: "Qué pesar", "Gente desalmada", "¿Cómo matan a la mamá y el niño?", se escuchaba entre los presentes, quienes no podían comprender la crueldad de los hechos que les arrebataron a una madre y su hijo en plena vía pública.
El grupo de criminalística de la Sijín de Cartago llegó al lugar de los hechos y realizó la inspección técnica, donde los cuerpos de la madre y su hijo fueron encontrados uno al lado del otro, evidenciando la brutalidad del ataque. Tras el procedimiento, los cuerpos fueron trasladados a Medicina Legal para sus respectivas necropsias, mientras las autoridades continúan con la investigación para dar con los responsables de este desgarrador crimen.
Dato
Alba Lucía Rivera, vivía con su hijo Juan David Posada Rivera en el Rincón de la Cruz, en el barrio Bellavista, Cartago. Se ganaba la vida vendiendo tintos en un carrito que ella misma había acondicionado, pero su familia también residía en el corregimiento de Puerto Caldas. La tragedia ha dejado consternada a su familia, amigos y vecinos, quienes aún no logran asimilar la pérdida de la madre y su hijo, víctimas de un ataque violento.
Dato
La comunidad no solo está consternada por este crimen, sino también indignada por la crudeza con la que se ha ejecutado este ataque.
¿Qué pasó?
A las 8:30 de la noche del sábado 30 de noviembre, en la carrera 9 entre calles 8 y 9 del barrio San Nicolás, se registró un violento ataque que dejó a madre e hijo gravemente heridos. La mujer, de 45 años, se encontraba trabajando en su carrito de tintos, que ella misma había acondicionado, acompañada de su hijo de 14 años, cuando dos sujetos llegaron sin mediar palabra y abrieron fuego contra ellos. Ambos quedaron tendidos en la calle, gravemente heridos, mientras que los agresores huyeron del lugar.
La comunidad del sector, al escuchar los disparos, no prestó mucha atención, ya que pensaron que se trataba de pólvora o alguna alborada dando inicio a diciembre. Sin embargo, las personas que se encontraban dentro de un establecimiento público salieron al escuchar el estruendo y fueron testigos de cómo un taxi arrancaba rápidamente del lugar, lo que hace suponer que los sicarios se desplazaban en ese vehículo. El ataque dejó a madre e hijo gravemente heridos, generando gran preocupación y conmoción en la zona.
Las autoridades policiales fueron alertadas de inmediato sobre el ataque y, al llegar al lugar, encontraron los cuerpos sin vida de Alba Lucía y su hijo Juan David. Ambos habían sido alcanzados por los disparos y ya no presentaban signos vitales. Las autoridades acordonaron el área para llevar a cabo la inspección judicial correspondiente.
La noticia del doble homicidio se propagó rápidamente por todo el barrio San Nicolás, causando consternación e indignación entre los vecinos, quienes salieron a observar la inspección técnica de los cuerpos. Con voces llenas de tristeza y rabia, la comunidad expresaba su desolación ante el crimen: "Qué pesar", "Gente desalmada", "¿Cómo matan a la mamá y el niño?", se escuchaba entre los presentes, quienes no podían comprender la crueldad de los hechos que les arrebataron a una madre y su hijo en plena vía pública.
El grupo de criminalística de la Sijín de Cartago llegó al lugar de los hechos y realizó la inspección técnica, donde los cuerpos de la madre y su hijo fueron encontrados uno al lado del otro, evidenciando la brutalidad del ataque. Tras el procedimiento, los cuerpos fueron trasladados a Medicina Legal para sus respectivas necropsias, mientras las autoridades continúan con la investigación para dar con los responsables de este desgarrador crimen.
Dato
Alba Lucía Rivera, vivía con su hijo Juan David Posada Rivera en el Rincón de la Cruz, en el barrio Bellavista, Cartago. Se ganaba la vida vendiendo tintos en un carrito que ella misma había acondicionado, pero su familia también residía en el corregimiento de Puerto Caldas. La tragedia ha dejado consternada a su familia, amigos y vecinos, quienes aún no logran asimilar la pérdida de la madre y su hijo, víctimas de un ataque violento.
Dato
La comunidad no solo está consternada por este crimen, sino también indignada por la crudeza con la que se ha ejecutado este ataque.
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