Los efectos de la presencia del denominado habitante de calle en la zona céntrica de la ciudad, tiene al borde del desespero a residentes y ...
Los efectos de la presencia del denominado habitante de calle en la zona céntrica de la ciudad, tiene al borde del desespero a residentes y comerciantes, por tal razón se realizó una reunión en busca de soluciones.
El Movimiento Cívico Ciudadano por Risaralda, realizó el jueves 1 de agosto, una reunión en el colegio San Vicente Hogar, al que llegaron vecinos, líderes barriales, comerciantes, representantes de la Administración y miembros de la Policía Nacional. Este encuentro se dio a raíz de los innumerables problemas que presenta la comuna Centro y que para efectos del trabajo que adelanta el Movimiento, se denomina zona 2 y va desde la Avenida 30 de Agosto, hasta la carrera 1 y de la calle 22 a la calle 45.
La comunidad sufre desde hace varios meses grandes dificultades por la presencia de consumidores y expendedores de sustancias, basuras sin control, delincuencia, prostitución e invasión del Espacio Público.
Aguilar expuso en su presentación que “Esta no es la Pereira en la que yo me crié, la convivencia se acabó, esos espacios de reunión con los vecinos para el compartir y trabajar por un propósito común ya no existe”. Esto en razón a que la comunidad que vive en esta zona, se podría decir vive secuestrada por el miedo, la zozobra y la amenaza constante de una mafia a la que llaman habitantes de calle, se desconoce qué tipo de mezcla es la que les venden pero se dedicaron a volver cada espacio un sanitario o un motel indiferente de la hora que sea, rasgan con rabia las bolsas y no se llevan mayor cosa, solo causan daño.
Un comerciante propietario de un local en la carrera 8 con calle 31, contó: “El domingo a las 3:00, una consumidora quebró los vidrios del establecimiento, tiró mi surtido a la calle y nadie me puede responder que porque es una enferma mental, entonces digo, si es así ¿por qué no está en el Homeris? Soy el que paga los impuestos y los protegen a ellos”. A esta primera reunión aparte de la teniente Bernal y el padrino, también llegaron el alcalde nocturno Mauricio Vega que se comprometió a buscar soluciones, el subsecretario de Seguridad Sebastián Madrid, representante de la Empresa de Aseo y funcionarios de Prados de Paz.
-Escoger y nombrar vigías cívicos comunitarios.
-Comparendos ambientales por el mal manejo de las basuras.
-Mesas de trabajo por comunas y corregimientos.
-Próxima reunión el 5 de septiembre.
-Invitar a los entes departamentales.
En una sola foto dos males, invasión del Espacio Público y habitante de calle, sin contar que fue tomada a las 8:00 de la mañana y que es plena carrera 7 entre calles 29 y 30. |
El Movimiento Cívico Ciudadano por Risaralda, realizó el jueves 1 de agosto, una reunión en el colegio San Vicente Hogar, al que llegaron vecinos, líderes barriales, comerciantes, representantes de la Administración y miembros de la Policía Nacional. Este encuentro se dio a raíz de los innumerables problemas que presenta la comuna Centro y que para efectos del trabajo que adelanta el Movimiento, se denomina zona 2 y va desde la Avenida 30 de Agosto, hasta la carrera 1 y de la calle 22 a la calle 45.
La comunidad sufre desde hace varios meses grandes dificultades por la presencia de consumidores y expendedores de sustancias, basuras sin control, delincuencia, prostitución e invasión del Espacio Público.
Así se desarrolló la reunión
El primero en tomar la palabra para explicar qué se haría esa noche, fue Juan Carlos Aguilar, presidente del Movimiento Cívico. “Este no es un encuentro político, ni religioso, tampoco vinimos a pelear con la Alcaldía, ni con el Concejo. Estamos acá porque todos somos ciudadanos, los policías son ciudadanos, los agentes de tránsito son ciudadanos y vinimos a proponer formas de trabajar, porque la Policía sola no es capaz. Este es un llamado de solidaridad”. Entre todas las voces, se escuchó algo que llamó la atención poderosamente, ‘si esto no fuera tan grave hubiesen llegado cinco o seis personas y mire la cantidad de gente que vino’.Aguilar expuso en su presentación que “Esta no es la Pereira en la que yo me crié, la convivencia se acabó, esos espacios de reunión con los vecinos para el compartir y trabajar por un propósito común ya no existe”. Esto en razón a que la comunidad que vive en esta zona, se podría decir vive secuestrada por el miedo, la zozobra y la amenaza constante de una mafia a la que llaman habitantes de calle, se desconoce qué tipo de mezcla es la que les venden pero se dedicaron a volver cada espacio un sanitario o un motel indiferente de la hora que sea, rasgan con rabia las bolsas y no se llevan mayor cosa, solo causan daño.
La oscuridad propicia la inseguridad y la prostitución. |
Voces de angustia
Llegó el turno para el público, Juan Carlos Aguilar, los enumeró y les pidió el favor de demorarse dos minutos por intervención, algunos se tomaron cuatro, porque las voces de confirmación de la anómala situación expuesta interrumpía el comentario. Juan Carlos Calderón preguntó a la teniente Valentina Bernal, jefe del grupo de Policía Comunitaria, qué había pasado con el trabajo de 2023, cuando lograron controlarlos y el Centro se tornó diferente, tranquilo. “Toca caminar por la calle, da miedo utilizar el andén con grupos de cinco y seis consumidores. Además expresó ¿y el muerto del SENA, nadie dice nada? Exigimos resultados, porque hablar por hablar solo suena bonito”.Un comerciante propietario de un local en la carrera 8 con calle 31, contó: “El domingo a las 3:00, una consumidora quebró los vidrios del establecimiento, tiró mi surtido a la calle y nadie me puede responder que porque es una enferma mental, entonces digo, si es así ¿por qué no está en el Homeris? Soy el que paga los impuestos y los protegen a ellos”. A esta primera reunión aparte de la teniente Bernal y el padrino, también llegaron el alcalde nocturno Mauricio Vega que se comprometió a buscar soluciones, el subsecretario de Seguridad Sebastián Madrid, representante de la Empresa de Aseo y funcionarios de Prados de Paz.
Cifra
200 habitantes de calle tienen más derechos que 20 mil ciudadanos que pagamos impuestos en el Centro, decían los asistentes.Dato
El cementerio San Camilo merece capítulo aparte, porque sus muros son letrinas y de los árboles que están cerca han saltado los ladrones por la noche.Algunos de los asistentes a la reunión. |
Horrible
El botadero a cielo abierto a uno de los costados del San Vicente Hogar, raya con lo ilógico. Esa misma noche de la reunión, una habitante de la bocacalle frente a la I.E. dejó su bolsa sobre otra muy grande con follaje de alguna floristería y al mismo tiempo un hombre encendía la pipa acurrucado al lado del montón de desechos.Destacado
Salir de misa de 6:30 de la iglesia María Dolorosa, un domingo, es terrorífico y solo para valientes, dada la oscuridad que bordea los colegios San Vicente y Adoratrices.El padrino
El alcalde Salazar designó a cada secretario y director, como padrinos de las comunas y corregimientos, fue así como designó a Luis Fernando González, director del Instituto de Movilidad de Pereira, también presente en la reunión, como el encargado de hacer diligenciamiento y trámite ejecutivo, como él mismo llama a las peticiones de la comunidad. “Estoy atento a escucharlos, a gestionar, me pueden llamar, no soy de muchas palabras, sí de acciones”.
Las propuestas
-Escoger y nombrar vigías cívicos comunitarios.-Comparendos ambientales por el mal manejo de las basuras.
-Mesas de trabajo por comunas y corregimientos.
-Próxima reunión el 5 de septiembre.
-Invitar a los entes departamentales.
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