El Padre Darío Valencia Uribe, párroco de la Iglesia María Auxiliadora, desapareció misteriosamente tras salir a encontrarse con un desconoc...
El Padre Darío Valencia Uribe, párroco de la Iglesia María Auxiliadora, desapareció misteriosamente tras salir a encontrarse con un desconocido interesado en comprar su camioneta. Desde entonces, el caso ha dejado a la comunidad sumida en la angustia y la espera de respuestas.
La última pista: la camioneta
Poco después de la desaparición, la camioneta del sacerdote, de 59 años, fue localizada en un parqueadero en Viterbo, Caldas. Al inspeccionar el vehículo, las autoridades encontraron rastros de sangre y la ausencia de una silla trasera, lo que intensificó las sospechas de un acto criminal.
La investigación avanza lentamente
El CTI de la Fiscalía en Pereira ha estado trabajando en el caso desde el primer día, pero los avances han sido lentos. Aunque una comisión fue asignada para indagar al principal sospechoso este mes, hasta ahora no se han revelado nuevos detalles significativos.
La iglesia no pierde la fe
Monseñor Rigoberto Corredor Bermúdez ha sido una figura clave en mantener la esperanza y el apoyo espiritual para la comunidad. En repetidas ocasiones, ha enfatizado la importancia de la oración y la solidaridad en estos momentos de incertidumbre.
"La oración nos mantiene unidos y fuertes, esperando la luz que nos guíe hacia la verdad," afirmó monseñor Corredor, haciendo un llamado a la comunidad para que no pierda la fe.
Un llamado a la comunidad
Mientras se espera una respuesta clara por parte de las autoridades, monseñor Corredor insta a la comunidad a acompañar a la familia del Padre Valencia y a mantenerse firmes en la fe. La iglesia continúa sus oraciones y vigilias, esperando un desenlace que traiga paz y claridad sobre este doloroso episodio.
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