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¡Por fin! La Virginia con menos inundaciones

Para nadie es un secreto que es mucho más económica la prevención, que la atención a las comunidades después de los estragos de la naturaleza.


El trabajo consiste no solo en desaparecer lo que tapona los sumideros, sino en limpiar los residuos que el vactor no sacó.


El Ideam ya hizo el anuncio del inicio lento pero seguro de la alta temporada de lluvias en la región Andina, por tal motivo en la Administración municipal del Puerto Dulce sobre el Cauca, trabajan desde ahora y de manera conjunta con la Empresa de Servicios Públicos para darle cumplimiento a las directrices de priorización de las actividades preventivas, para las cuales Juan Carlos Botero, mandatario de los virginianos, impartió instrucciones precisas.

Evitar el reflujo


“Lo primero es la limpieza de sumideros, porque estos generan mayor inconvenientes a la hora de las lluvias fuertes y recurrentes en el municipio. Hago especial hincapié en que estas actividades no corresponden a los comentarios como ‘alcantarillas muy sucias’, que no son otra cosa que una situación que surge de la misma comunidad por la poca cultura ciudadana y deficiente sentido de pertenencia”, expuso el burgomaestre.


En estos sumideros los obreros han encontrado que los mayores problemas se generan a partir de los residuos sólidos domiciliarios y envolturas de productos que se consumen en la calle, cuando posteriormente se arroja la ‘basurita’ al suelo, situación que Botero define como una cultura de la autodestrucción y que “Lo más triste es que después de este daño que la misma comunidad hace o permite, alguien critique y ataque a una administración con apenas cuatro meses de gestión”.


La ciudadanía sigue sin hacer conciencia sobre el manejo de residuos sólidos.

Acciones en concreto

“Trabajamos no solo en este frente de manera preventiva y juiciosa, también en la revisión, corrección y afinación de los equipos de bombeo en compañía de los profesionales del Ingenio Risaralda”, explicó Juan Carlos Botero.


La temporada de lluvias genera afectaciones muy puntuales en este municipio, en esto enfatiza el alcalde, pues cuando son muy intensas y recurrentes las precipitaciones, para lo que se preparan anticipadamente, no necesariamente significa que se deben presentar inundaciones como las que han hecho visible a este municipio. “Hay algunos lugares del municipio que, como consecuencia de la poca cultura ciudadana se afectan por colapso de sumideros, como ya lo expliqué y realmente no hay previstos incrementos en los niveles de los ríos Risaralda y Cauca, que sugieran inundaciones por reflujo”.


Además, desde la Alcaldía trabajan en la organización del inventario de capacidades con los organismos de socorro, la asignación de responsabilidades según la EMRE, y otras actividades desde el Consejo Municipal para la Gestión del Riesgo de Desastres.

Los obreros han encontrado lugares muy críticos, no solo con residuos sólidos, sino con grasas.

Los barrios de la limpieza

El alcalde dijo que se han hecho intervenciones con el vactor en diferentes sectores, como el barrio San Carlos, porque en los Consejos Comunitarios el pedido ha sido la limpieza de los sumideros, como ocurrió también en el barrio Tangarife, y el propósito es llegar a La Playa, El Progreso y Alfonso López, por su cercanía al río Risaralda, para mitigar la dificultad que tiene La Virginia.


Cabe recordar que un equipo vactor es un tipo de vehículo que trabaja mediante un sistema mixto de bombas (presión-succión). Estos equipos se disponen para el mantenimiento de las redes de alcantarillado y de pozos sépticos.


“Nosotros lo que pretendemos es hacer una buena limpieza, no superficial, porque sobre ese tema hay varios comentarios”, informó Botero.

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