Los edificios están bien, la política no
Liliana Cardona Marín
Hay una frase popular que dice: “la envidia mata más que el cáncer”, que se ha puesto especialmente de moda en el Área Metropolitana de Pereira, ante la cercanía de las contiendas electorales locales.
En días recientes se dio a conocer la noticia de que el edificio de la sede de la Fiscalía ubicado en Dosquebradas, presentaba fallas estructurales que obligarían a demolerla y que también había otros problemas que obligaron a que los funcionarios abandonaran el edificio.
Desde el grupo constructor Rivera desean hacer claridad sobre la comidilla que se ha generado a raíz de todo el tema de esta propiedad. La participación que este grupo tenía en la propiedad era del 50% y ya la vendieron, ellos explicaron que no construyeron el edificio, pero saben que se hizo con todos los permisos ambientales por parte de la Carder y legales por parte de la alcaldía de Dosquebradas.
En cuanto a las grietas, el informe concluye que durante la inspección visual de la edificación, se realizan hallazgos que están principalmente sobre los muros divisorios o particiones y que están relacionadas a elementos no estructurales, esto significa que dichos elementos no hacen parte de la resistencia sísmica de la edificación y no comprometen la estabilidad de la estructura principal.
Las patologías por humedad se presentan por el mal manejo o captación de aguas de cubierta, fachadas, infiltración o superficiales de acuerdo a la topografía del terreno. Después de realizada la inspección visual de la edificación se concluyó que los daños hallados no representan riesgo de colapso de la edificación y que al evidenciarse daños en elementos como muros no estructurales, estos pueden ser reparados sin tener que realizar demolición total de los muros.
El especialista logró determinar que el origen estaba en un derrame que se intentó remover del suelo. Se descartó la posibilidad de que los olores provinieron de zonas aledañas o externas, se identificó que la fuente de los fuertes olores procede de una sustancia química que se encuentra en el piso del lugar, la que presuntamente se filtró de un automóvil que se encontraba allí hacía ya largo tiempo.
La recomendación se basa en que se requiere dar pronto manejo a la contaminación descrita, porque al tratarse de un compuesto desconocido, que pudo haber reaccionado con los agentes de limpieza empleados inicialmente puede generar afectación a la salud ante la inhalación de vapores o gases que de allí se emanan.
Los medios de comunicación han indagado y aducen que la constructora ganó el doble, pero al buscar la versión directa y saber de primera mano cómo se dio el proceso, se tiene que el metro cuadrado salió en $4 millones, mientras que en el mercado actual el precio del metro cuadrado es de $7 millones y que por ejemplo para el anunciado World Trade Center el valor estará alrededor de $9 millones.
La pregunta siguiente a los empresarios fue ¿Cómo lo lograron? Cuando la queja de todos los constructores y encargados de obras, sobre todo las públicas, excusan el retraso en las alzas en los precios del material para la construcción. La respuesta fue que tras una experiencia de 28 años en el sector y la eficiencia en las compras dio como resultado que el valor del edificio de la Contraloría con un área de 2.588 metros cuadrados que más terrazas llega a los 3.000 metros, haya sido de $12.150 millones, de los que pocos saben es que el 70% se van en el pago de impuestos.
Hay una frase popular que dice: “la envidia mata más que el cáncer”, que se ha puesto especialmente de moda en el Área Metropolitana de Pereira, ante la cercanía de las contiendas electorales locales.
En días recientes se dio a conocer la noticia de que el edificio de la sede de la Fiscalía ubicado en Dosquebradas, presentaba fallas estructurales que obligarían a demolerla y que también había otros problemas que obligaron a que los funcionarios abandonaran el edificio.
De quién es el edificio
Hay que empezar por aclarar que la edificación no le pertenece a la Fiscalía General de la Nación, ni al Estado, allí se paga un canon de arrendamiento a Leasing Bancolombia, que ellos luego transfieren.Desde el grupo constructor Rivera desean hacer claridad sobre la comidilla que se ha generado a raíz de todo el tema de esta propiedad. La participación que este grupo tenía en la propiedad era del 50% y ya la vendieron, ellos explicaron que no construyeron el edificio, pero saben que se hizo con todos los permisos ambientales por parte de la Carder y legales por parte de la alcaldía de Dosquebradas.
Qué dicen los informes
Un ingeniero especialista entregó este año un Informe Estructural en el que quedaron consignadas las patologías y las recomendaciones sobre esta construcción localizada en la avenida Simón Bolívar carrera 16 # a 70-442 de Dosquebradas. La estructura está compuesta por tres niveles principales sobre la vía de uso de oficinas y tres sótanos de parqueadero que tienen más de seis años de antigüedad, no tiene edificaciones aledañas y se encuentra cerca a la vereda Agua Azul.En cuanto a las grietas, el informe concluye que durante la inspección visual de la edificación, se realizan hallazgos que están principalmente sobre los muros divisorios o particiones y que están relacionadas a elementos no estructurales, esto significa que dichos elementos no hacen parte de la resistencia sísmica de la edificación y no comprometen la estabilidad de la estructura principal.
Las patologías por humedad se presentan por el mal manejo o captación de aguas de cubierta, fachadas, infiltración o superficiales de acuerdo a la topografía del terreno. Después de realizada la inspección visual de la edificación se concluyó que los daños hallados no representan riesgo de colapso de la edificación y que al evidenciarse daños en elementos como muros no estructurales, estos pueden ser reparados sin tener que realizar demolición total de los muros.
Algo huele mal…
El informe de la visita técnica realizada por un químico industrial de la UTP ante la contaminación por olores logró evidenciar que se presenta un fuerte olor y que se hace cada vez más perceptible, a pesar de que no se observa a simple vista la fuente.El especialista logró determinar que el origen estaba en un derrame que se intentó remover del suelo. Se descartó la posibilidad de que los olores provinieron de zonas aledañas o externas, se identificó que la fuente de los fuertes olores procede de una sustancia química que se encuentra en el piso del lugar, la que presuntamente se filtró de un automóvil que se encontraba allí hacía ya largo tiempo.
La recomendación se basa en que se requiere dar pronto manejo a la contaminación descrita, porque al tratarse de un compuesto desconocido, que pudo haber reaccionado con los agentes de limpieza empleados inicialmente puede generar afectación a la salud ante la inhalación de vapores o gases que de allí se emanan.
El edificio de la Contraloría
El grupo Rivera sí fue el constructor de esta moderna edificación inteligente de última generación, en la que todo funciona y que cuenta hasta con el servicio de guardería para los hijos de los empleados, porque se pensó en todo. Aquí el ruido radica en el valor de la misma.
Los medios de comunicación han indagado y aducen que la constructora ganó el doble, pero al buscar la versión directa y saber de primera mano cómo se dio el proceso, se tiene que el metro cuadrado salió en $4 millones, mientras que en el mercado actual el precio del metro cuadrado es de $7 millones y que por ejemplo para el anunciado World Trade Center el valor estará alrededor de $9 millones.
La pregunta siguiente a los empresarios fue ¿Cómo lo lograron? Cuando la queja de todos los constructores y encargados de obras, sobre todo las públicas, excusan el retraso en las alzas en los precios del material para la construcción. La respuesta fue que tras una experiencia de 28 años en el sector y la eficiencia en las compras dio como resultado que el valor del edificio de la Contraloría con un área de 2.588 metros cuadrados que más terrazas llega a los 3.000 metros, haya sido de $12.150 millones, de los que pocos saben es que el 70% se van en el pago de impuestos.
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