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Risaralda tiene Escuela nacional de Habilidades y destrezas para el sistema moda

Con una inversión de $460 millones por parte de la Gobernación, el Sena y la Alcaldía de Dosquebradas, entró en funcionamiento la Escuela Nacional de Habilidades y Destrezas para el sector de la confección.


 
“Es un sueño que veníamos trabajando desde el 2020 junto con el Sena y la Alcaldía de Dosquebradas, para darle una mayor habilidad a nuestro departamento, para que sea mucho más competitivo, para que las personas puedan adquirir capacitaciones en el sector de las confecciones en tiempos mucho más cortos de los que veníamos haciendo con el Sena que eran mínimo seis meses, ahora lo podemos lograr en dos semanas”, dijo Ana MaríaValencia Gómez, secretaria de Desarrollo Económico y Competitividad.

En la escuela con sede en el Sena de Dosquebradas, los beneficiados no solo adquirirán habilidades en confección, sino también en habilidades blandas de liderazgo, trabajo en equipo, resolución de conflictos, comunicación asertiva, igualdad y equidad de género, empoderamiento de la mujer, maltrato psicológico y acoso a través de la Escuela de liderazgo y formación en género Empoderate de la Secretaría de Mujer, Familia y Desarrollo Social.

“Primero hacemos un test de habilidades descubrimos cuáles son, luego hacemos una formación en competencias específicas que dura 15 días... en máquina plana, máquina fileteadora, sesgadora, y nos posibilita a nosotros la habilitación laboral temprana con un plus, vemos trabajo en equipo, comunicación asertiva, porque hoy por hoy el empresario busca que tengamos habilidades técnicas, pero también que seamos un muy buen ser humano”, dijo Sandra Yulieth García González, subdirectora Centro de Diseño e Innovación Tecnológica Industrial Sena Risaralda.

A la fecha ya 150 mujeres han recibido capacitación. “La motivación es mucha,porque la sociedad nos ve a nosotras las mujeres diferente, y nosotras no somos dife-rente, es una oportunidad muy grande para las personas que estamos desempleadas”, dijo Sandra PatriciaIglesias Monroy, beneficiaría de la Escuela.

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