Liliana Cardona Marín Si en Pereira se hiciera un concurso de nombres bonitos para barrios, sin duda alguna Perla del Sur se lo llevaría. Si...
Liliana Cardona Marín
Si en Pereira se hiciera un concurso de nombres bonitos para barrios, sin duda alguna Perla del Sur se lo llevaría. Si el nombre hiciera alusión a la realidad y los barrios o mejor dicho, la calidad de vida de sus habitantes se atendiera de la manera correcta, este barrio sería algo así como la joya de la corona, lo de mostrar a propios y visitantes. Desde allí innumerables familias le han entregado a la ciudad, a punta de trabajo y sacrificio muchos profesionales que dejan en alto el nombre de empresas y de la misma alcaldía.
Pero la realidad es otra: en un recorrido que el Q’hubo hizo por Perla del Sur, se topó con una sorpresa poco agradable y es que los sumideros o alcantarillas de aguas lluvias están tapados, tanto en calles principales, como en la parte de atrás. ¿La razón? en primer lugar la falta de cultura ciudadana que así como así convirtieron los desagües en depósito de la basura que resulta al barrer el frente de las casas, de aceite de carro y para rematar de tierra de una de las vías que se encuentra sin pavimentar y aquí entra el pecado de la administración; ya que no hace campañas, no pone multas a los desordenados y no termina las vías de acceso en los barrios periféricos.
Una vía necesaria
En este sector de Pereira hay una parte de la solución al embotellamiento que se presenta en toda la ciudad. Desde allí se conecta con la avenida Las Américas, el problema es que es una vía que está destapada a la que obviamente hay que hacerle obra de alcantarillado, porque si el barrio contiguo que es Atenas, no tiene estas obras, quiere decir que el trabajo debe comenzar desde allí.Por esta carretera hay bastante circulación de personas a pie y en bicicleta, motos, autos y el transporte público que entra y sale de uno de los parqueadero-taller de Megabus. Esta vía tiene ocho luminarias, de las cuales siete están apagadas y una está prendida día y noche desde hace tres meses, aseguran los vecinos.
Un problema de nunca acabar
El destino final de inservibles ya es un problema que se salió de las manos en todo Pereira y hasta en Dosquebradas, obviamente Perla del Sur, no podía ser la excepción y por la vía destapada hay un punto crítico, porque cuando se pone un mueble viejo, otras personas indisciplinadas asumen que también pueden dejar los residuos que no sacaron en el horario indicado. Entonces el llamado es a no dar $2.000, al habitante de calle para que deje en cualquier parte los inservibles y a que se ubiquen cámaras de seguridad que permita identificar también a los infractores.
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