Los yiperos se sienten en el olvido

 La Ley 2057 de 2020, establece al yip Willys como Patrimonio Cultural Mueble de la Nación, al ser parte fundamental del Patrimonio Cultural Cafetero de Colombia. Este año se cumplirán en septiembre dos años de esta Ley, la misma que en su planteamiento inicial indicó que también debían salvaguardar a los yiperos.

Hay que empezar por recordar que este vehículo llegó a ese país de vocación eminentemente agrícola a mediados del siglo XX. Es gracias al yip que los campesinos han podido sacar sus cosechas y asistir a citas médicas, como a diligencias en los centros urbanos a pesar de las macabras condiciones que presentan la mayoría de vías terciarias.

Ahora es el turno para los titanes que conducen estas máquinas por caminos que casi dan con precipicios, quienes al tiempo llevan 15 personas, 10 mercados, cilindro de gas y hasta gallinas, como si fueran por una autopista europea.

Un gremio que pide ayuda y vigilancia

Ser yipero indica conocer el camino con los ojos cerrados, ser el amigo de todos en la vereda, porque muchas veces hay que fiar el pasaje y cobrarlo el sábado que hay plata con los graneitos de café. Es mantener intacta la fiebre por conducir los Willys a sabiendas que la competencia está brava con los piratas.

Los yiperos piden que los volteen a mirar de vez en cuando, porque como se dice popularmente se los están comiendo los impuestos. Además, deben cumplir a cabalidad con el horario de su recorrido así solo lleven un pasajero.

La entrega semanal al propietario del vehículo se encuentra entre $250 y $300 mil pesos semanales. Estos conductores afirman que las vías de sus recorridos están en malas condiciones.  Están totalmente desprovistos de ayudas o subsidios, como los que pretendía impulsar la citada Ley.

Solo en la empresa Líneas Pereiranas están afiliados 13 conductores y en la ciudad hay inscritas en el Área Metropolitana Centro Occidente (AMCO) otras siete empresas de los conocidos Yipaos, que en su mayoría se ubican en la 13 con 9 y 10.

Luis Fernando Castaño - yipero

Deberían organizarnos un poquito, porque nuestros gastos mensuales son casi de $2 millones, entonces de las semanas buenas nos toca que guardar para las semanas malas. El invierno nos ha pegado duro, mucho hueco yo hago la ruta El Guayabo, Estación Pereira, San Marino y La Honda.

Hector Cardona - yipero

50 años dedicado a la conducción. El impuesto no es muy caro, pero los seguros, la póliza y el tecno mecánico están muy caros para un carro de estos que da tan poquito y encima sostener a la familia y darle estudio a los hijos, no alcanza para nada, a eso hay que sumarles que diario hay que tanquear el yip con $50 o $60 mil pesos. Desde hace tres años no nos autorizan incremento en las tarifas, los mismos $5.000.