Estrenan parque gracias al reciclaje en el Gilberto Peláez
El rojo intenso, verde, amarillo y azul ahora resaltan en el barrio Gilberto Peláez de Pereira. Ayer se hizo oficialmente la inauguración de su parque infantil en madera plástica con la presencia de representantes de la comunidad, de Atesa de Occidente y Opam, la concesionaria del Aeropuerto Matecaña.
Todos los convocados llegaron a pesar del inclemente sol y muy juiciosos mostraron su carné vacunación a pesar de ser un evento a espacio abierto. Los niños que acompañaron a sus padres obviamente fueron los protagonistas principales, ellos que no saben nada de actos protocolarios y cortes de cintas, se montaron en los columpios sin pensarlo dos veces.
Cómo se logró
La comunidad trabajó cumplidamente separando en la fuente y organizando el material reciclable, como les habían dicho desde Atesa que se hacía. Cuatro toneladas de recuperables fue el resultado del amor por un propósito y que en bien del planeta hicieron estas familias durante tres años.
Por su parte OPAM, sumó para la consecución de la meta 27 toneladas de reciclaje que reunió durante el mismo lapso. “Ambas cantidades hubiesen sido mayores pero se atravesó la pandemia”, expresó Natalia Díaz coordinadora del área de Responsabilidad Social de Atesa.
Cómo se logró
La comunidad trabajó cumplidamente separando en la fuente y organizando el material reciclable, como les habían dicho desde Atesa que se hacía. Cuatro toneladas de recuperables fue el resultado del amor por un propósito y que en bien del planeta hicieron estas familias durante tres años.
Por su parte OPAM, sumó para la consecución de la meta 27 toneladas de reciclaje que reunió durante el mismo lapso. “Ambas cantidades hubiesen sido mayores pero se atravesó la pandemia”, expresó Natalia Díaz coordinadora del área de Responsabilidad Social de Atesa.
El parque
La unidad recreativa está hecha de madera plática y compuesta por cinco columpios, una resbaladilla, aros, y puentes para imaginar mil aventuras. Desde Atesa informaron que es el primero en la ciudad, pero que invitan a que los líderes de todos los barrios motiven a sus comunidades para la consecución de muchos más a través de la separación en la fuente.
Fue adquirido con los recursos que resultaron de la venta de las 31 toneladas de material recuperado, no es que con lo que se recogió se haya fabricado. Este tipo de estructuras no tiene el mismo final a causa del moho que se puede encontrar en otros parques y su vida útil depende del manejo que le den los usuarios.
Díaz también aseguró: “No solo recuperamos un espacio, entregamos alegría y un proyecto que aleja del consumo a jóvenes que utilizan la falta de estos espacios como excusa para los malos hábitos, también los pone a reflexionar sobre el cuidado que deben tener del mismo, porque ahí está el trabajo de sus padres y hermanos para conseguirlo”.
Desde el área de Responsabilidad Social aclararon que “Atesa se compromete con el mantenimiento de este espacio, siempre y cuando las familias también se comprometan con seguir entregando el material reciclable a la ruta asignada”. Los líderes interesados en este tipo de proyectos pueden preguntar qué deben hacer en el área de Responsabilidad Social de Atesa.
Cifra
67 familias trabajaron para la consecución de este parque, pero son muchas más las beneficiadas con esta instalación en el barrio Gilberto Peláez
La unidad recreativa está hecha de madera plática y compuesta por cinco columpios, una resbaladilla, aros, y puentes para imaginar mil aventuras. Desde Atesa informaron que es el primero en la ciudad, pero que invitan a que los líderes de todos los barrios motiven a sus comunidades para la consecución de muchos más a través de la separación en la fuente.
Fue adquirido con los recursos que resultaron de la venta de las 31 toneladas de material recuperado, no es que con lo que se recogió se haya fabricado. Este tipo de estructuras no tiene el mismo final a causa del moho que se puede encontrar en otros parques y su vida útil depende del manejo que le den los usuarios.
Díaz también aseguró: “No solo recuperamos un espacio, entregamos alegría y un proyecto que aleja del consumo a jóvenes que utilizan la falta de estos espacios como excusa para los malos hábitos, también los pone a reflexionar sobre el cuidado que deben tener del mismo, porque ahí está el trabajo de sus padres y hermanos para conseguirlo”.
Desde el área de Responsabilidad Social aclararon que “Atesa se compromete con el mantenimiento de este espacio, siempre y cuando las familias también se comprometan con seguir entregando el material reciclable a la ruta asignada”. Los líderes interesados en este tipo de proyectos pueden preguntar qué deben hacer en el área de Responsabilidad Social de Atesa.
Cifra
67 familias trabajaron para la consecución de este parque, pero son muchas más las beneficiadas con esta instalación en el barrio Gilberto Peláez
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