¡Feliz Día del Profesor!
Una de las labores que más se debe destacar durante este aislamiento obligatorio es la que hacen los profesores. A pesar de que algunas personas critican las clases virtuales, estos docentes ponen todo su empeño y conocimiento para lograr que sus estudiantes puedan aprender lo necesario.
Incluso muchos de ellos han tenido que evolucionar en su forma de enseñar; entre eso manejar más la parte tecnológica y utilizar todas sus habilidades para lograr que los niños y jóvenes presten atención a lo que ellos enseñan. Es así como desde Q’hubo queremos homenajearlos con la historia de una maestra, que durante esta crisis ha puesto todo el amor y vocación que tiene por esta profesión.
Historia
Mónica María Osorio es docente de la Institución educativa Bernardo Arias Trujillo; ella nos compartió un poco de su experiencia para enseñar en estos tiempos de la pandemia. “El colegio durante la cuarentena diseñó una estrategia de colegios en red. Consiste en que los niños de primaria y de grados sextos tengan comunicación con los profesores a través de Whatsapp y de séptimo en adelante a través de Facebook. Esto tiene como objetivo brindarles apoyo a los estudiantes y a sus padres, porque sabemos que esto no es fácil para nadie. En esta actividad se trabajan 3 elementos: El pensamiento lector, el lógico matemático y el bilingüe. Basados en estos pensamientos hemos creado trabajos especiales de contenidos muy variados”.
Trabajo
Buscando una forma creativa de que los estudiantes puedan aprender y estar activos, los docentes están implementando algunas ideas novedosas. “Lo que hacemos es que en la semana les enviamos a los niños dos actividades. En ellas los menores se enfrentarán a trabajos que tengan que ver con el inglés, matemáticas, lenguaje, entre otros y lo que hacemos es pedir evidencias de la tarea y acompañamiento de los padres.
Por ejemplo, hicimos un trabajo de mitos y leyendas; estaba la parte teórica, pero los chicos tenían que hacer al mismo tiempo un disfraz que representará esta labor. En otra hicimos una sobre los números naturales y de ahí se crearon historias, crónicas, cuentos”.
Afectividad
Según Mónica la situación que se vive actualmente no ha sido fácil, pero de todo esto se debe aprender algo. “No debemos dejar de lado la educación, pero ahora no se trata de hacer notas, trabajos o de tener una simple calificación, se trata también de que los padres logren disfrutar a sus hijos ahora que pueden pasar mayor tiempo con ellos, además decirles que no están solos, que nosotros estamos ahí para guiarlos, es un trabajo mancomunado; aquí entre todos podremos salir adelante”.
Incluso muchos de ellos han tenido que evolucionar en su forma de enseñar; entre eso manejar más la parte tecnológica y utilizar todas sus habilidades para lograr que los niños y jóvenes presten atención a lo que ellos enseñan. Es así como desde Q’hubo queremos homenajearlos con la historia de una maestra, que durante esta crisis ha puesto todo el amor y vocación que tiene por esta profesión.
Historia
Mónica María Osorio es docente de la Institución educativa Bernardo Arias Trujillo; ella nos compartió un poco de su experiencia para enseñar en estos tiempos de la pandemia. “El colegio durante la cuarentena diseñó una estrategia de colegios en red. Consiste en que los niños de primaria y de grados sextos tengan comunicación con los profesores a través de Whatsapp y de séptimo en adelante a través de Facebook. Esto tiene como objetivo brindarles apoyo a los estudiantes y a sus padres, porque sabemos que esto no es fácil para nadie. En esta actividad se trabajan 3 elementos: El pensamiento lector, el lógico matemático y el bilingüe. Basados en estos pensamientos hemos creado trabajos especiales de contenidos muy variados”.
Trabajo
Buscando una forma creativa de que los estudiantes puedan aprender y estar activos, los docentes están implementando algunas ideas novedosas. “Lo que hacemos es que en la semana les enviamos a los niños dos actividades. En ellas los menores se enfrentarán a trabajos que tengan que ver con el inglés, matemáticas, lenguaje, entre otros y lo que hacemos es pedir evidencias de la tarea y acompañamiento de los padres.
Por ejemplo, hicimos un trabajo de mitos y leyendas; estaba la parte teórica, pero los chicos tenían que hacer al mismo tiempo un disfraz que representará esta labor. En otra hicimos una sobre los números naturales y de ahí se crearon historias, crónicas, cuentos”.
Afectividad
Según Mónica la situación que se vive actualmente no ha sido fácil, pero de todo esto se debe aprender algo. “No debemos dejar de lado la educación, pero ahora no se trata de hacer notas, trabajos o de tener una simple calificación, se trata también de que los padres logren disfrutar a sus hijos ahora que pueden pasar mayor tiempo con ellos, además decirles que no están solos, que nosotros estamos ahí para guiarlos, es un trabajo mancomunado; aquí entre todos podremos salir adelante”.
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