Los señalan de herir a un vecino problemático

Libres, pero vinculados a un proceso judicial, así quedaron dos agricultores, que con machete y un azadón atacaron a un jornalero de la finca donde ellos trabajan en el corregimiento de Combia.

¿Qué pasó?
Se trata de Rogelio García, de 74 años de edad y Jhon Alexánder García López, de 26 años, quienes fueron capturados mediante una orden judicial por unidades de la Sijín, por ser los presuntos responsables de haber agredido a Diego Mauricio Urrea Valencia.

Los hechos ocurrieron el miércoles 8 de abril a las 8:30 de la mañana, en la vereda Santander, finca Bellavista, cuando la víctima estaba laborando junto a uno de los colegas y el mayordomo, los hoy procesados, quienes ya habían tenido enfrentamientos tiempo atrás con la víctima, quien al parecer es una persona muy problemática. Ese día tuvieron una discusión porque Diego, su vecino, les iba a cortar el agua; los hoy investigados, cansados de los problemas con la víctima y en medio de la rabia, lo cogieron a machete, le dieron múltiples planazos en diferentes partes del cuerpo y hasta con un azadón.

Diego, intentando huir, se tiró por un barranco y se fracturó los dos brazos, debido a esto fue trasladado al hospital local donde fue intervenido quirúrgicamente.

La audiencia
La fiscalía les imputó el delito de tentativa de homicidio, cargos que no aceptaron y la fiscalía pidió detención domicilia para Rogelio e intramural para Jhon Alexánder. Pero la defensa de los procesados manifestó que la víctima ha sido denunciada 70 veces ante la corregidora del sector, tiene denuncias penales, y que este se les metía a la casa, los robaba, los amenaza, los insulta e inclusive golpeaba a la esposa de Rogelio y aseguró que sus cobijados son personas de bien, trabajadoras, honestas y muy queridas en el corregimiento.

Tras escuchar al abogado, sus argumentos y las pruebas, el juez Segundo Penal municipal de control de garantías de Pereira, les interpuso una medida no privativa de la libertad que consiste en tener buena conducta, no acercarse a la víctima, tener buena conducta social y familiar y deberán comparecer ante los estrados judiciales cuando sean requeridos.