Un nuevo proceso deberá enfrentar el general en retiro de la Policía, Mauricio Santoyo, por enriquecimiento ilícito. Así lo dio a conocer la...
Un nuevo proceso deberá enfrentar el general en retiro de la Policía, Mauricio Santoyo, por enriquecimiento ilícito. Así lo dio a conocer la Fiscalía ayer a través de un comunicado, en el que advierte que el exjefe de seguridad del Gobierno de Álvaro Uribe estaría relacionado con dineros de la mafia. En Q’HUBO le contamos los detalles. Además, hablamos con el historiador, con doctorado en Ciencias Políticas, Alejandro Blanco para entender el panorama que enfrenta Santoyo.
¿QUIÉN ES MAURICIO SANTOYO?
El general (r) Mauricio Alfonso Santoyo Velasco nació en San José de Pare (Boyacá). Es casado y tiene tres hijos. Antes de todo este lío judicial, fue comandante del Gaula Urbano de Medellín entre 1995 y 2001, luego pasó a ser jefe de seguridad del presidente Álvaro Uribe Vélez, desde el 2002 hasta el año 2010, por lo que era considerado por muchos como el hombre de confianza del actual senador.
ACUSADO DE ENRIQUECIMIENTO ILÍCITO
En un comunicado emitido por la Fiscalía, en la mañana de ayer, se advierte que luego de valorar el material probatorio, un juez de la República le impuso medida de aseguramiento privativa de la libertad al general en retiro Mauricio Santoyo por delitos de enriquecimiento ilícito y lavado de activos. Según las investigaciones, Santoyo construyó un patrimonio de más de 6.193 millones de pesos, producto de dineros que habría recibido de los desmovilizados grupos de autodefensas mientras estuvo vinculado a la Policía Nacional, entre 1999 y 2009. Con testimonios obtenidos en el marco de la Ley de Justicia y Paz, se logró conocer que la organización de narcotraficantes conocida como ‘La Oficina’ y cabecillas de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), le habrían pagado a Santoyo para que dejara en libertad a integrantes de esas estructuras y los alertara sobre los movimientos y operativos de la fuerza pública. Por esos favores, el general había recibido más de 1.700 millones de pesos.
SUS ANTECEDENTES
Cabe destacar que este no es el primer lío que el general Mauricio Santoyo enfrenta con la justicia. En 2012 el oficial fue extraditado a los Estados Unidos por un caso en su contra. Ese mismo año una Corte del Estado de Virginia, en el país del norte, lo condenó a 13 años de cárcel por haber cooperado con grupos paramilitares en Colombia. Por lo que se convirtió en el primer general de la República en ser solicitado en extradición por los Estados Unidos. Regresó a Colombia en calidad de deportado en abril de 2019 y desde esa fecha, cabe mencionar, permanece preso de la libertad por disposición de un fiscal de la Dirección Especializada contra las Violaciones de los Derechos Humanos, que lo involucró en el proceso de desaparición forzada de Claudia Patricia Monsalve Pulgarín y Ángel José Quintero Mesa, miembros de la Asociación de Familiares de Detenidos y Desaparecidos (Asfaddes). Esto último está en manos de la JEP.
El general (r) Mauricio Alfonso Santoyo Velasco nació en San José de Pare (Boyacá). Es casado y tiene tres hijos. Antes de todo este lío judicial, fue comandante del Gaula Urbano de Medellín entre 1995 y 2001, luego pasó a ser jefe de seguridad del presidente Álvaro Uribe Vélez, desde el 2002 hasta el año 2010, por lo que era considerado por muchos como el hombre de confianza del actual senador.
ACUSADO DE ENRIQUECIMIENTO ILÍCITO
En un comunicado emitido por la Fiscalía, en la mañana de ayer, se advierte que luego de valorar el material probatorio, un juez de la República le impuso medida de aseguramiento privativa de la libertad al general en retiro Mauricio Santoyo por delitos de enriquecimiento ilícito y lavado de activos. Según las investigaciones, Santoyo construyó un patrimonio de más de 6.193 millones de pesos, producto de dineros que habría recibido de los desmovilizados grupos de autodefensas mientras estuvo vinculado a la Policía Nacional, entre 1999 y 2009. Con testimonios obtenidos en el marco de la Ley de Justicia y Paz, se logró conocer que la organización de narcotraficantes conocida como ‘La Oficina’ y cabecillas de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), le habrían pagado a Santoyo para que dejara en libertad a integrantes de esas estructuras y los alertara sobre los movimientos y operativos de la fuerza pública. Por esos favores, el general había recibido más de 1.700 millones de pesos.
SUS ANTECEDENTES
Cabe destacar que este no es el primer lío que el general Mauricio Santoyo enfrenta con la justicia. En 2012 el oficial fue extraditado a los Estados Unidos por un caso en su contra. Ese mismo año una Corte del Estado de Virginia, en el país del norte, lo condenó a 13 años de cárcel por haber cooperado con grupos paramilitares en Colombia. Por lo que se convirtió en el primer general de la República en ser solicitado en extradición por los Estados Unidos. Regresó a Colombia en calidad de deportado en abril de 2019 y desde esa fecha, cabe mencionar, permanece preso de la libertad por disposición de un fiscal de la Dirección Especializada contra las Violaciones de los Derechos Humanos, que lo involucró en el proceso de desaparición forzada de Claudia Patricia Monsalve Pulgarín y Ángel José Quintero Mesa, miembros de la Asociación de Familiares de Detenidos y Desaparecidos (Asfaddes). Esto último está en manos de la JEP.
Habría que tener claro, con respecto a las imputaciones, qué tipo de cargos pueden entrar dentro del sistema de justicia transicional, y qué tipo de imputaciones pueden y deben entrar en el sistema ordinario. Serían dos condenas distintas, pero con condiciones diferentes; por ejemplo, en el caso de la JEP podrían ser si él cumple con todos los requisitos de justicia, verdad, reparación y no repetición; es decir, que cuente absolutamente todo. Él podría pagar una pena máxima de 7u8 años, que es lo que contempla la JEP; en caso de no ser así, esos crímenes pasarían a la justicia ordinariaALEJANDRO BLANCO Historiador con doctorado en Ciencias Políticas.
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