El partido nunca se jugó para Jorge Albeiro Bedoya Ramírez. La carretera se lo arrebató antes de llegar a Apía, al que se dirigía con su esp...
El partido nunca se jugó para Jorge Albeiro Bedoya Ramírez. La carretera se lo arrebató antes de llegar a Apía, al que se dirigía con su esposa, su nieta y su hija, quien iba a disputar un encuentro de fútbol.

¿Qué pasó?
Eran cerca del mediodía del domingo, en el tramo entre La Felisa y La Pintada, en la vía Manizales - Medellín, se presentó un choque entre dos vehículos particulares. Jorge, un agricultor muy querido en Aguadas, Caldas, murió en el lugar. En el carro también iban su esposa, su nieta y otra joven de Pácora, quienes resultaron heridas.
El golpe fue tan fuerte que al sitio tuvieron que llegar unidades del Cuerpo de Bomberos de La Pintada, así como ambulancias de las concesiones Pacífico 2 y Pacífico 3, para atender a los siete lesionados, entre ellos una menor de 8 años.
¿Quién era Jorge?
Vivía en la vereda El Edén, en Aguadas, donde cultivaba café y plátano. Lo recuerdan como un hombre servicial, familiar, buen hermano y mejor amigo. Su comunidad hoy lo llora y se pregunta cómo una jornada deportiva terminó marcada por el luto.
Dato
Aunque el accidente ocurrió fuera del departamento, la familia venía rumbo a Apía, el fútbol era el destino, pero la tragedia se adelantó en la vía.

¿Qué pasó?
Eran cerca del mediodía del domingo, en el tramo entre La Felisa y La Pintada, en la vía Manizales - Medellín, se presentó un choque entre dos vehículos particulares. Jorge, un agricultor muy querido en Aguadas, Caldas, murió en el lugar. En el carro también iban su esposa, su nieta y otra joven de Pácora, quienes resultaron heridas.
El golpe fue tan fuerte que al sitio tuvieron que llegar unidades del Cuerpo de Bomberos de La Pintada, así como ambulancias de las concesiones Pacífico 2 y Pacífico 3, para atender a los siete lesionados, entre ellos una menor de 8 años.
¿Quién era Jorge?
Vivía en la vereda El Edén, en Aguadas, donde cultivaba café y plátano. Lo recuerdan como un hombre servicial, familiar, buen hermano y mejor amigo. Su comunidad hoy lo llora y se pregunta cómo una jornada deportiva terminó marcada por el luto.
Dato
Aunque el accidente ocurrió fuera del departamento, la familia venía rumbo a Apía, el fútbol era el destino, pero la tragedia se adelantó en la vía.
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