Por andar de rata y amenazando, Cristian Daniel Trujillo Enciso, de 27 años, natural de Santa Rosa de Cabal, terminó recibiendo una golpiza ...
Por andar de rata y amenazando, Cristian Daniel Trujillo Enciso, de 27 años, natural de Santa Rosa de Cabal, terminó recibiendo una golpiza y luego la cárcel. Todo comenzó en pleno centro en la carrera 7 entre calles 16 y 17, cuando el hombre ingresó a una tienda de ropa decidido a hacerse notar.
¿Vale más tu vida o la mía?
Aproximadamente a la 1:30 de la tarde, Cristian Daniel llegó al establecimiento FL-lingerie, vestido con pantalón negro, chaqueta negra, gorra morada y descalzo. Armado con un objeto corto-punzante, empezó a lanzar amenazas. Se escucha claramente en el video captado por las cámaras de seguridad, el tipo, con tono desafiante, le dice a la mujer encargada, ¿Vale más tu vida o la mía, mami? Yo no le tengo miedo a la cárcel, ¿Te vas a hacer matar?.
La situación se tornó más tensa cuando el delincuente comenzó a forcejear con la mujer, quien, presa del pánico, gritaba desesperadamente. Fue en ese instante cuando entró en escena un hombre que, sin pensarlo dos veces, salió en defensa de la víctima.
¡Le dieron palo por bandido!
Los ánimos se calentaron rápidamente. Otros ciudadanos, al percatarse del escándalo, decidieron no quedarse de brazos cruzados. El ladrón fue sacado a la fuerza del local y ahí mismo le dieron una paloterapia de esas que enseñan modales. Golpes iban y venían mientras el presunto ladrón intentaba zafarse.
La intervención de la policía
La Policía Metropolitana, que realizaba labores de prevención cerca de la zona céntrica, fue alertada por la comunidad sobre una presunta riña. Al llegar al lugar, los uniformados encontraron al hombre retenido por la comunidad, que intentaba tomar justicia por sus propias manos.
¿Vale más tu vida o la mía?
Aproximadamente a la 1:30 de la tarde, Cristian Daniel llegó al establecimiento FL-lingerie, vestido con pantalón negro, chaqueta negra, gorra morada y descalzo. Armado con un objeto corto-punzante, empezó a lanzar amenazas. Se escucha claramente en el video captado por las cámaras de seguridad, el tipo, con tono desafiante, le dice a la mujer encargada, ¿Vale más tu vida o la mía, mami? Yo no le tengo miedo a la cárcel, ¿Te vas a hacer matar?.
La situación se tornó más tensa cuando el delincuente comenzó a forcejear con la mujer, quien, presa del pánico, gritaba desesperadamente. Fue en ese instante cuando entró en escena un hombre que, sin pensarlo dos veces, salió en defensa de la víctima.
¡Le dieron palo por bandido!
Los ánimos se calentaron rápidamente. Otros ciudadanos, al percatarse del escándalo, decidieron no quedarse de brazos cruzados. El ladrón fue sacado a la fuerza del local y ahí mismo le dieron una paloterapia de esas que enseñan modales. Golpes iban y venían mientras el presunto ladrón intentaba zafarse.
La intervención de la policía
La Policía Metropolitana, que realizaba labores de prevención cerca de la zona céntrica, fue alertada por la comunidad sobre una presunta riña. Al llegar al lugar, los uniformados encontraron al hombre retenido por la comunidad, que intentaba tomar justicia por sus propias manos.
La víctima, administradora de la tienda, les explicó que Trujillo había intentado robar diferentes elementos y, en el forcejeo, la golpeó en el hombro y el brazo derecho con el arma blanca, además de dañar el computador de la tienda, un equipo de mesa marca HP, avaluado en 4 millones de pesos.
Para salvaguardar la vida del capturado, los policías lo trasladaron a la estación ubicada en la carrera novena con calle 10. Posteriormente, fue llevado al hospital Unilibre para ser valorado por las lesiones que presentaba.
La audiencia del piloso
En las audiencias preliminares, de Trujillo no aceptó los cargos de hurto calificado y agravado en modalidad de tentativa, lesiones personales y daño en bien ajeno. A pesar de su negativa, el juez le dictó detención intramural en el Inpec.
Que quede de lección
La Policía hace un llamado a la comunidad para que denuncie cualquier acto delictivo a través de la línea 123. Las autoridades reiteran su compromiso con la seguridad ciudadana, mientras el avispado de Trujillo se enfrenta a las consecuencias de sus acciones.
Para salvaguardar la vida del capturado, los policías lo trasladaron a la estación ubicada en la carrera novena con calle 10. Posteriormente, fue llevado al hospital Unilibre para ser valorado por las lesiones que presentaba.
La audiencia del piloso
En las audiencias preliminares, de Trujillo no aceptó los cargos de hurto calificado y agravado en modalidad de tentativa, lesiones personales y daño en bien ajeno. A pesar de su negativa, el juez le dictó detención intramural en el Inpec.
Que quede de lección
La Policía hace un llamado a la comunidad para que denuncie cualquier acto delictivo a través de la línea 123. Las autoridades reiteran su compromiso con la seguridad ciudadana, mientras el avispado de Trujillo se enfrenta a las consecuencias de sus acciones.
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