La tranquilidad del sector rural de La Bananera, en el corregimiento de La Florida, se rompió de manera inquietante y desconcertante cuando ...
La tranquilidad del sector rural de La Bananera, en el corregimiento de La Florida, se rompió de manera inquietante y desconcertante cuando dos cuerpos fueron hallados sin vida en los corrales de la finca La Italia. Las víctimas, identificadas como José Ananías Molina Soto, de 84 años, y Johon Darío Aristizábal García, de 56 años, fueron encontrados con signos de violencia extrema.
¿Qué pasó?
Todo comenzó el miércoles cuando John Darío salió temprano de su casa, ubicada en el barrio La Pradera de Dosquebradas, con destino a la finca donde tenía ganado, él se fue junto a su amigo José Ananías, quien vivía en la otra calle del mismo sector. Sin embargo, horas después, el silencio comenzó a inquietar a su familia.
Su hijo relató a Q’Hubo que su madre intentó comunicarse con John en repetidas ocasiones, pero su celular sonaba insistentemente sin recibir respuesta. “Mamá me dijo que llamara a mi papá porque no contestaba. Lo intenté varias veces y nada. Me preocupé porque ya eran casi las 8 de la noche y aún no había señales de él”, contó el joven, con evidente angustia.
Desesperado, el hijo decidió ir a la finca acompañado de su novia y algunos amigos. Al llegar al primer portón, dejaron el carro y caminaron en medio de la oscuridad. Al llegar, comenzó a gritar, “¡Papá, papá!”, pero el silencio era absoluto. Al encender la linterna de su celular, el joven iluminó el camino y se encontró con la escena el cuerpo sin vida de José Ananías, con heridas de arma de fuego en la cabeza y el pecho.
Pero eso no terminó allí. Más adelante, encontró el cuerpo de su padre, Johon Darío estaba en el suelo, con múltiples heridas en la cara y el antebrazo izquierdo y cuello, producidas aparentemente con un machete, además de dos impactos de bala cerca de la espalda, ya sin vida. El reloj marcaba las 9:15 de la noche.
Todo es incierto
La familia desmiente cualquier vínculo con actividades ilegales y aclara que las versiones que circulan en redes sociales, donde se afirma que el crimen habría ocurrido por el robo de ganado, son totalmente falsas.
“Es una mentira lo que están diciendo. Mi papá compró ese ganado el año pasado en las ferias de La Virginia. No es justo que manchen su nombre de esa manera”, aseguró el hijo, exigiendo respeto y que quienes difundieron la información errada se retracten públicamente.
El misterio del silencio
Un vecino del lugar aseguró que no escuchó ruidos extraños ni disparos, a pesar de que el crimen ocurrió en horas de la tarde. Según su relato, alrededor de las 5 de la tarde vio llegar la camioneta Mazda con placas ZXS869 bajo una fuerte lluvia.
Zona sin cámaras
La finca La Italia, donde ocurrió el doble homicidio, está ubicada en una zona rural que carece de cámaras de seguridad, lo que dificulta la identificación de los asesinos. Sin embargo, los investigadores hallaron 6 vainillas calibre 9 mm en la escena, que serán clave para esclarecer el caso.
Investigadores del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía General de la Nación se desplazaron hasta el sitio del suceso para llevar a cabo las pesquisas correspondientes. Tras acordonar el área y realizar la inspección técnica de los dos cuerpos, estos fueron trasladados a Medicina Legal, donde se les practicó la necropsia de ley para su posterior entrega a los familiares, quienes les darán cristiana sepultura.
La Cifra
83 asciende el numero de homicidios en lo que va del 2025.
Dato
El señor Johon Darío Aristizábal García planeaba vender el ganado por problemas de salud y entregar los potreros que tenía arrendados, pues esa finca la tenía alquilada desde hace un año y medio.
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