La incertidumbre y el dolor se apoderan de una familia, Yesica Alejandra Guzmán Castaño, de 30 años, está desaparecida desde el domingo, Día...
La incertidumbre y el dolor se apoderan de una familia, Yesica Alejandra Guzmán Castaño, de 30 años, está desaparecida desde el domingo, Día de la Madre, y sus seres queridos están desesperados buscando respuestas.
El misterio comenzó aquel domingo en el barrio San Gregorio, cuando su esposo le hizo una videollamada alrededor de las 4:30 de la tarde. “Hablamos como siempre, saludó a mi abuelita, a mi mamá y a mi hermana. Todo parecía normal. Quedamos en vernos más tarde para salir a comer perros o hamburguesas, como a ella le gustaba”, relató su esposo a Q’hubo.
Pero a las 7 de la noche, la situación cambió de manera inesperada. El esposo la llamó para confirmar el plan, pero ella nunca contestó. “Intenté una y otra vez, pero nada. Llamé a su mamá pensando que tal vez estaba con ella, pero tampoco tenía noticias. La preocupación empezó a crecer. Su mamá me dijo que estaba muy inquieta porque Yesica había llamado rápidamente y solo le dijo, ‘En estos días la llamo y le digo dónde estoy’, y colgó el teléfono”.
Desde entonces, nadie sabe nada de Yesica. Su esposo asegura que ya ha preguntado a amigos, vecinos y conocidos, pero nadie ha visto ni escuchado nada que indique su paradero. “Es raro porque ella casi no salía, trabajábamos juntos vendiendo empanadas y chorizos. No entiendo qué pudo haber pasado, no llevaba ropa, dinero ni nada. Solo nuestra hija pequeña, de dos años y medio”, contó angustiado.
Yesica vivía en San Gregorio, cerca de la represa y la Vidriera Otún. Si alguien tiene alguna información que pueda ayudar a encontrarla, por favor comuníquese al 3183609348.
Pero a las 7 de la noche, la situación cambió de manera inesperada. El esposo la llamó para confirmar el plan, pero ella nunca contestó. “Intenté una y otra vez, pero nada. Llamé a su mamá pensando que tal vez estaba con ella, pero tampoco tenía noticias. La preocupación empezó a crecer. Su mamá me dijo que estaba muy inquieta porque Yesica había llamado rápidamente y solo le dijo, ‘En estos días la llamo y le digo dónde estoy’, y colgó el teléfono”.
Desde entonces, nadie sabe nada de Yesica. Su esposo asegura que ya ha preguntado a amigos, vecinos y conocidos, pero nadie ha visto ni escuchado nada que indique su paradero. “Es raro porque ella casi no salía, trabajábamos juntos vendiendo empanadas y chorizos. No entiendo qué pudo haber pasado, no llevaba ropa, dinero ni nada. Solo nuestra hija pequeña, de dos años y medio”, contó angustiado.
Yesica vivía en San Gregorio, cerca de la represa y la Vidriera Otún. Si alguien tiene alguna información que pueda ayudar a encontrarla, por favor comuníquese al 3183609348.
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