Catalina Rojas Sánchez, de 32 años, no logró despertar del coma en el que estaba, luego del accidente de tránsito que sufrió cuando espera...
Catalina Rojas Sánchez, de 32 años, no logró despertar del coma en el que estaba, luego del accidente de tránsito que sufrió cuando esperaba el bus en la comuna de Villasantana, en compañía de su hija de 9 años.
¿Qué pasó?
El accidente se registró a las 5:30 de la tarde del sábado 2 de abril en la manzana 12 del barrio Intermedio. Catalina salió de su casa con la niña, cruzó la calle y se pasó al frente a esperar la buseta. Iban a quedarse el fin de semana en la vivienda de su mamá en Cuba.
En ese momento bajó un hombre que conducía un motocarro marca AYCO de placa 821 NCL quien presuntamente se quedó sin frenos, maniobró y con la carroza golpeó a Catalina que estaba en el andén, la mujer cayó al suelo, quedó inconsciente pues recibió el golpe en la cabeza, pero antes logró salvar a su hija, pues la empujó con la mano cuando observó el vehículo encima de ellas.
El motocarro se volcó en la vía, los vecinos tras el aparatoso accidente salieron a ver qué había pasado y observaron a la mujer gravemente herida, la cual fue trasladada al hospital de Kennedy y luego fue remitida al San Jorge, allí ingresó con un trauma craneoencefálico severo y tres fracturas.
La joven madre fue intervenida porque tenía sangre en el cerebro, pero este estaba muy inflamado y los médicos no podían hacer nada más, solo esperar a que este se desinflamara, sin embargo Catalina murió el día viernes 8 de abril.
El grupo de criminalística del Instituto de Tránsito de Pereira realizó la inspección técnica al cuerpo y lo trasladó a Medicina Legal donde fue reclamado por su familia en la mañana de ayer.
Su vida
Catalina era oriunda de Pereira y se desempeñaba como ama de casa; nació y se crió en la comuna Villasantana, era la mayor de dos hermanas, vivió con su esposo Harold Salazar González y fruto de ese amor tuvieron una niña.
“Era una excelente madre, hija y hermana, una mujer alegre, amable, solidaria, amiguera, muy colaboradora, optimista y responsable”.
Dato
Su cuerpo será velado en su casa en el barrio Intermedio donde se crió y donde vive toda su familia.
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