No aguantan la basura y los escombros en la carrera 10
A pesar del trabajo que ha venido realizando la empresa de Aseo de Pereira, aún en algunas calles y barrios se registra la presencia de basuras y desechos.
Es el caso de algunos residuos que se pueden observar en la carrera 10 entre calles séptima y octava en el barrio Corocito, lugar en donde la gente debe bajarse de los andes para poder caminar. El peligro es que por ser una avenida principal hay un gran flujo de vehículos que transitan por allí, lo que representa un peligro para los transeúntes tener que salirse del andén para pasar la calle.
Problema
Al parecer este problema con las basuras y los escombros no es algo nuevo en este barrio. Desde hace un año aproximadamente María Lucero Sánchez ha venido denunciando esta situación, y aunque por algunos días mejora, lo cierto es que el problema continúa permaneciendo en este lugar, “aquí la gente convirtió esto en un basurero, vienen y tiran los escombros y las basuras como si nada. Incluso gente que no es del sector, que no conocemos.
El problema es que en uno de los focos donde están los escombros, hay una casa abandonada, que se ha convertido el lugar preferido para que los habitantes de calle lleven todos los residuos que se encuentran”.
Peligro
Y es que según Lucero, estas acciones se han transformado en un problema de salud pública. “Por acá viven muchos niños y adultos mayores, para poder caminar por este sector, les toca bajarse de los andenes pues los desechos son tantos que obstruyen el paso de todo aquel que pase por allí; esto sin tener en cuenta que los carros pasan muy rápido y se puede registrar un accidente.
Sumado a dicha situación, también encima de estas basuras hay ya mosquitos, y esto nos da temor, ya que de seguir así todos los que vivimos por este lugar podríamos enfermarnos”.
Aseo
El gerente de la Empresa de Aseo de Pereira, Mario León Ossa, explicó que “la basura normal no se acumula porque siempre pasa la ruta de recolección, 3 veces a la semana. Lo que se acumulan son los escombros que la gente tira porque cambiaron de colchón, muebles, hacen una reparación en la casa, entre otros.
Es un trabajo de sensibilización que debemos de hacer con la comunidad, hay sitios que se recogen y al otro día está lleno otra vez. Los vecinos muchas veces saben quién fue el que arrojó la basura y no denuncian; es un trabajo entre todos. De igual forma verificaremos este caso, y estaremos atentos para darle una pronta solución”.
Cifra
787 mil pesos puede costar la multa de arrojar basuras, muebles, escombros u otro tipo de residuos a la calle.
Al parecer este problema con las basuras y los escombros no es algo nuevo en este barrio. Desde hace un año aproximadamente María Lucero Sánchez ha venido denunciando esta situación, y aunque por algunos días mejora, lo cierto es que el problema continúa permaneciendo en este lugar, “aquí la gente convirtió esto en un basurero, vienen y tiran los escombros y las basuras como si nada. Incluso gente que no es del sector, que no conocemos.
El problema es que en uno de los focos donde están los escombros, hay una casa abandonada, que se ha convertido el lugar preferido para que los habitantes de calle lleven todos los residuos que se encuentran”.
Peligro
Y es que según Lucero, estas acciones se han transformado en un problema de salud pública. “Por acá viven muchos niños y adultos mayores, para poder caminar por este sector, les toca bajarse de los andenes pues los desechos son tantos que obstruyen el paso de todo aquel que pase por allí; esto sin tener en cuenta que los carros pasan muy rápido y se puede registrar un accidente.
Sumado a dicha situación, también encima de estas basuras hay ya mosquitos, y esto nos da temor, ya que de seguir así todos los que vivimos por este lugar podríamos enfermarnos”.
Aseo
El gerente de la Empresa de Aseo de Pereira, Mario León Ossa, explicó que “la basura normal no se acumula porque siempre pasa la ruta de recolección, 3 veces a la semana. Lo que se acumulan son los escombros que la gente tira porque cambiaron de colchón, muebles, hacen una reparación en la casa, entre otros.
Es un trabajo de sensibilización que debemos de hacer con la comunidad, hay sitios que se recogen y al otro día está lleno otra vez. Los vecinos muchas veces saben quién fue el que arrojó la basura y no denuncian; es un trabajo entre todos. De igual forma verificaremos este caso, y estaremos atentos para darle una pronta solución”.
Cifra
787 mil pesos puede costar la multa de arrojar basuras, muebles, escombros u otro tipo de residuos a la calle.
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