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Saludo en tono de despedida

“Mis bebés son demasiado pequeños para leer esto ahora, y apenas me reconocerían con mi equipo puesto. Pero si me pierden por el COVID-19, quiero que sepan que mami realmente intentó hacer su trabajo”, fue el dramático mensaje que la doctora Cornelia Griggs les dejó a sus hijos en redes sociales, con miedo de morir, pues se encuentra en un hospital de Nueva York y teme contagiarse de coronavirus, ya que al parecer carece de la dotación para protegerse.

Se niega a dejar entrar a su hijo a casa en plena cuarentena
El diario New York Post dio a conocer la historia de Peter Levine (izq.), un hombre que se niega a dejar entrar a su hijo a la casa en plena cuarentena por coronavirus. ¿La Razón? Matt Levine (der.), de 21 años, se fue de vacaciones a Texas (EE. UU.) con varios amigos, y de regreso pretendía que todos llegaran a la casa de su padre, en Nanuet, pero Peter lo impidió pues “¡sus abuelos viven aquí y no hay necesidad de exponerlos a Dios sabe a qué estuvo expuesto él!”, dijo en entrevista.

Le sirvió droga experimental

Médicos le brindaron a una paciente una “droga xperimental” tras contagiarse de coronavirus, y luego de tomarse el medicamento le dieron de alta en la ciudad de Paraná (Argentina). Así lo aseguró para la televisión de su país José Luis Pereyra, hijo de la mujer de 87 años que ya se encuentra en casa. Ahora neumólogos analizan el caso para probarlo con otros pacientes.

Policía rompe la cuarentena por sexo
En Mendoza (Argentina), un policía y su novia fueron detenidos violando el aislamiento, tras ser descubiertos teniendo sexo en un carro. Gabriel Feris (37 años), un auxiliar de la comisaría 29, fue hallado con las manos en la masa por sus colegas.

También le tocó teletrabajo
Desde que comenzó la crisis de COVID-19, por primera vez el presidente de Rusia no pudo reunirse con los miembros de su gobierno, pues debido a que tuvo contacto con un médico infectado, a Vladimir Putin también le tocó acudir al teletrabajo.

Periodista no pudo aguantar el llanto
Mientras hacía un reporte para el canal RTS, en el que mostraba la cruda realidad que se vive en Guayaquil(Ecuador) por cuenta del coronavirus, este periodista llamado Carlos Gurumendi, quien lleva 26 años ejerciendo su profesión, terminó llorando en vivo ante la cámara.