Los robos en Pereira parecen no tener freno. A diario se registran casos de comerciantes y empleados que son víctimas de la delincuencia, y ...
Los robos en Pereira parecen no tener freno. A diario se registran casos de comerciantes y empleados que son víctimas de la delincuencia, y esta vez el turno fue para una mujer trabajadora que fue intimidada con un arma de fuego mientras cumplía su jornada laboral en un reconocido establecimiento de la ciudad.
¿Qué pasó?
El hecho ocurrió en el Oxxo ubicado en la carrera 7 con calle 30 de Pereira, el domingo 2 de noviembre, alrededor de las 8:30 de la noche.
La víctima, una empleada de 48 años, se encontraba atendiendo normalmente cuando un joven ingresó al local, tomó de la nevera una bebida energética marca Speed Max y se acercó al mostrador para preguntar si estaba en promoción. En cuestión de segundos, el sujeto sacó un arma de fuego y le apuntó directamente, exigiéndole que le entregara todo el dinero que tenía en la caja registradora. La mujer no tuvo más opción que obedecer. El delincuente tomó 450.000 pesos en efectivo y salió corriendo del lugar, sin que nadie pudiera detenerlo.
Una vez el sujeto huyó, la empleada dio aviso de inmediato a las autoridades policiales, quienes llegaron al sitio para recolectar información y revisar las cámaras de seguridad del establecimiento. Los uniformados asesoraron a la víctima para que interpusiera la denuncia formal ante la Fiscalía por los canales establecidos, mientras se iniciaron las respectivas investigaciones para dar con el responsable del hurto a comercio.
¿Qué pasó?
El hecho ocurrió en el Oxxo ubicado en la carrera 7 con calle 30 de Pereira, el domingo 2 de noviembre, alrededor de las 8:30 de la noche.
La víctima, una empleada de 48 años, se encontraba atendiendo normalmente cuando un joven ingresó al local, tomó de la nevera una bebida energética marca Speed Max y se acercó al mostrador para preguntar si estaba en promoción. En cuestión de segundos, el sujeto sacó un arma de fuego y le apuntó directamente, exigiéndole que le entregara todo el dinero que tenía en la caja registradora. La mujer no tuvo más opción que obedecer. El delincuente tomó 450.000 pesos en efectivo y salió corriendo del lugar, sin que nadie pudiera detenerlo.
Una vez el sujeto huyó, la empleada dio aviso de inmediato a las autoridades policiales, quienes llegaron al sitio para recolectar información y revisar las cámaras de seguridad del establecimiento. Los uniformados asesoraron a la víctima para que interpusiera la denuncia formal ante la Fiscalía por los canales establecidos, mientras se iniciaron las respectivas investigaciones para dar con el responsable del hurto a comercio.

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