Los gritos, la furia y los golpes se apoderaron de otra casa más; cada vez son más los casos de violencia que dejan a mujeres golpeadas, ame...
Los gritos, la furia y los golpes se apoderaron de otra casa más; cada vez son más los casos de violencia que dejan a mujeres golpeadas, amenazadas y con miedo dentro de su propio hogar. Una mujer fue brutalmente atacada por su pareja sentimental, quien al llegar del trabajo la acusó de infiel, la insultó, la golpeó y la humilló sin compasión. La violencia fue tal, que ella terminó con múltiples heridas y treinta días de incapacidad médica.
¿Qué pasó?
Todo comenzó cuando el hombre, identificado como Edwin Antonio Benítez Hidalgo, llegó del trabajo a eso de las 7 de la noche del miércoles 7 de agosto, hasta la manzana 1, casa 1 del barrio Veracruz, comuna Villasantana, donde vivía junto a su pareja. Según el relato de la mujer, empezó a revisarle el celular, vio unas llamadas y le reclamó furioso. De inmediato le propinó un puño en la boca y le gritó que la iba a matar. En medio del ataque, el sujeto la amenazó con mandarla a matar con alias Pechuga, asegurando que no necesitaba plata para que sus “amigos” hicieran el trabajo. También le dijo que le echaría ácido en la cara, la desnudó, la golpeó en sus partes íntimas, la cacheteó, la arrastró al cuarto de la hija y le dio planazos con un machete en brazos y piernas. Todo este relato lo hizo el fiscal en la audiencia.
Ella, desesperada, alcanzó a quitarle un cucharón con el que él también la estaba agrediendo y se lo lanzó para defenderse. Pero la furia del hombre no se detuvo, continuó golpeándola hasta dejarla llena de moretones y heridas por todo el cuerpo.
Los vecinos, al escuchar los gritos, alertaron a la Policía Nacional, que llegó al sitio y encontró a la pareja forcejeando. La mujer fue trasladada al hospital, donde recibió atención médica e incapacidad por 30 días.
El historial
La víctima K.S. relató que no era la primera vez que vivía este tipo de maltrato. En noviembre del año anterior, el mismo hombre la lanzó por unas escaleras, golpeándola en la cabeza. También contó que él le prohibía maquillarse, hablar con su familia, vestirse como quería y salir de la casa, además de encerrarla y escupirle en la cara constantemente.
La audiencia
El agresor fue presentado ante un juez y la Fiscalía le imputó el delito de feminicidio agravado en grado de tentativa. Durante la diligencia no aceptó los cargos, pese a las pruebas y al testimonio de la víctima.
La Fiscalía pidió medida de aseguramiento en centro carcelario, pero el juez decidió otorgarle libertad con vigilancia, bajo el beneficio de la justicia restaurativa. Aun así, deberá presentarse cada ocho días ante la Fiscalía, someterse a tratamiento psicológico y entregar un informe mensual sobre su evolución.
Dato
El sujeto incluso habría amenazado a un joven apodado Sombra, asegurando que también lo mandaría a matar. En una de las llamadas que hizo desde el celular de la mujer, se jactó de tener “amigos que matan sin cobrar un peso”, dejando claro el nivel de peligro que representaba para ella.

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