Aunque en el pueblo todos se conocen, los pillos creen que pueden esconderse entre la gente. Pero tarde o temprano caen, el que debe, paga. ...
Aunque en el pueblo todos se conocen, los pillos creen que pueden esconderse entre la gente. Pero tarde o temprano caen, el que debe, paga.
Qué pasó
A eso de las 5:30 de la tarde, cuando muchos ya estaban tomando tinto en el parque principal de Belén de Umbría, los policías que hacían registros y control pillaron a un sujeto que andaba relajado como si nada.
Se trata de José Uber Sucre Niaza, de 22 años, natural de Mistrató, a quien al revisar los antecedentes le salió una orden de captura vigente por hurto calificado y agravado, emanada por el Juzgado Tercero de Ejecución de Penas, desde el 29 de mayo de este año.
Dato
El hombre no era ningún santo, tenía una anotación en el sistema por el mismo delito de hurto y, para rematar, dos comparendos bajo la Ley 1801, uno por andar con armas blancas o sustancias peligrosas y otro por faltarle al respeto a la autoridad.
La caída
Los uniformados no le dieron tiempo ni de correr. Apenas vieron que el documento marcaba orden de captura, le leyeron sus derechos y lo dejaron a disposición de la Fiscalía, que ahora decidirá su futuro.
Qué pasó
A eso de las 5:30 de la tarde, cuando muchos ya estaban tomando tinto en el parque principal de Belén de Umbría, los policías que hacían registros y control pillaron a un sujeto que andaba relajado como si nada.
Se trata de José Uber Sucre Niaza, de 22 años, natural de Mistrató, a quien al revisar los antecedentes le salió una orden de captura vigente por hurto calificado y agravado, emanada por el Juzgado Tercero de Ejecución de Penas, desde el 29 de mayo de este año.
Dato
El hombre no era ningún santo, tenía una anotación en el sistema por el mismo delito de hurto y, para rematar, dos comparendos bajo la Ley 1801, uno por andar con armas blancas o sustancias peligrosas y otro por faltarle al respeto a la autoridad.
La caída
Los uniformados no le dieron tiempo ni de correr. Apenas vieron que el documento marcaba orden de captura, le leyeron sus derechos y lo dejaron a disposición de la Fiscalía, que ahora decidirá su futuro.
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