La camioneta se estrelló de frente contra el tanque de gasolina del camión y en segundos todo se convirtió en un infierno. El conductor de l...
La camioneta se estrelló de frente contra el tanque de gasolina del camión y en segundos todo se convirtió en un infierno. El conductor de la camioneta murió incinerado en el acto, mientras el chofer del furgón cargado de marranos alcanzó a escapar de las llamas que lo rodeaban.
¿Qué pasó?
Ayer viernes 12 de septiembre, hacia las 01:00 de la tarde, la Variante Condina a la altura del kilómetro 2 fue escenario de un infierno. Una camioneta Chevrolet Tracker gris de placas ZZR-190, se estrelló con un camión International rojo, placas UVM-200, cargado con carne de cerdo en canal para el grupo Éxito.
El conductor del furgón, identificado como Javier Sierra León, de 30 años, natural de Bogotá y residente en el barrio Andalucía de Kennedy, relató que vio cómo la camioneta se le venía encima, le pitó varias veces para alertar al otro chofer y trató de orillarse, pero el impacto fue inevitable. El golpe dio de lleno en el tanque de gasolina del camión, lo que provocó una fuga masiva de combustible.
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El chofer del furgón, que transportaba marranos en canal, logró salir con vida, pero quedó con el susto marcado en la cara al ver cómo las explosiones redujeron la camioneta y su carga terminó chamuscada.
Dato
En toda la zona se escucharon las dos explosiones. De los automotores no quedó absolutamente nada, el camión desarmado, la camioneta vuelta chatarra y las llantas regadas por la vía daban cuenta de la violencia del impacto.

De la camioneta no quedó nada, apenas un montón de hierro retorcido y cenizas regadas por la carretera.
Ambos vehículos ardieron en llamas. El camión quedó pegado a la zona verde que también agarró candela, mientras los marranos colgados se chamuscaron por el fuego. La camioneta desapareció entre el humo, no quedó nada de ella. El conductor murió calcinado en el acto; apenas pudieron deducir que era un hombre porque uno de sus testículos explotó entre las llamas.
El choque fue tan fuerte que el motor de la camioneta salió volando y quedó a varios metros del lugar. El cuerpo quedó irreconocible, por lo que Medicina Legal buscará alguna forma para identificarlo, tal vez mediante carta dental o ADN.
Dato
Bomberos oficiales y voluntarios de Pereira atendieron la emergencia con tres máquinas y 11 unidades.
Mientras tanto, el conductor del camión, ileso pero desesperado, quedó a la espera de otro vehículo que recogiera la carga, ya que habían pasado más de tres horas sin cadena de frío y parte de la carne ya estaba afectada por el fuego.
El sobreviviente
Javier Sierra León, de 30 años, residente en Bogotá, manejaba el camión rojo cargado con carne de cerdo en canal. Salió ileso físicamente, pero se mostró nervioso y conmovido al declarar que el accidente no fue su culpa y que, a pesar de maniobrar y pitar, no pudo evitar la tragedia.
La investigación
Las autoridades manejan varias hipótesis, el conductor de la camioneta pudo haber sufrido un infarto, un microsueño o simplemente perdió el control del volante.
El levantamiento
Unidades de criminalística de carreteras llegaron casi una hora después del siniestro. Realizaron la inspección técnica del lugar, fijaron la escena y procedieron a recoger los restos carbonizados del conductor de la camioneta. Posteriormente, fueron trasladados al Instituto de Medicina Legal para la necropsia correspondiente y la plena identificación de la víctima.
¿Qué pasó?
Ayer viernes 12 de septiembre, hacia las 01:00 de la tarde, la Variante Condina a la altura del kilómetro 2 fue escenario de un infierno. Una camioneta Chevrolet Tracker gris de placas ZZR-190, se estrelló con un camión International rojo, placas UVM-200, cargado con carne de cerdo en canal para el grupo Éxito.
El conductor del furgón, identificado como Javier Sierra León, de 30 años, natural de Bogotá y residente en el barrio Andalucía de Kennedy, relató que vio cómo la camioneta se le venía encima, le pitó varias veces para alertar al otro chofer y trató de orillarse, pero el impacto fue inevitable. El golpe dio de lleno en el tanque de gasolina del camión, lo que provocó una fuga masiva de combustible.
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El chofer del furgón, que transportaba marranos en canal, logró salir con vida, pero quedó con el susto marcado en la cara al ver cómo las explosiones redujeron la camioneta y su carga terminó chamuscada.
Dato
En toda la zona se escucharon las dos explosiones. De los automotores no quedó absolutamente nada, el camión desarmado, la camioneta vuelta chatarra y las llantas regadas por la vía daban cuenta de la violencia del impacto.

De la camioneta no quedó nada, apenas un montón de hierro retorcido y cenizas regadas por la carretera.
Ambos vehículos ardieron en llamas. El camión quedó pegado a la zona verde que también agarró candela, mientras los marranos colgados se chamuscaron por el fuego. La camioneta desapareció entre el humo, no quedó nada de ella. El conductor murió calcinado en el acto; apenas pudieron deducir que era un hombre porque uno de sus testículos explotó entre las llamas.
El choque fue tan fuerte que el motor de la camioneta salió volando y quedó a varios metros del lugar. El cuerpo quedó irreconocible, por lo que Medicina Legal buscará alguna forma para identificarlo, tal vez mediante carta dental o ADN.
Dato
Bomberos oficiales y voluntarios de Pereira atendieron la emergencia con tres máquinas y 11 unidades.
Mientras tanto, el conductor del camión, ileso pero desesperado, quedó a la espera de otro vehículo que recogiera la carga, ya que habían pasado más de tres horas sin cadena de frío y parte de la carne ya estaba afectada por el fuego.
El sobreviviente
Javier Sierra León, de 30 años, residente en Bogotá, manejaba el camión rojo cargado con carne de cerdo en canal. Salió ileso físicamente, pero se mostró nervioso y conmovido al declarar que el accidente no fue su culpa y que, a pesar de maniobrar y pitar, no pudo evitar la tragedia.
La investigación
Las autoridades manejan varias hipótesis, el conductor de la camioneta pudo haber sufrido un infarto, un microsueño o simplemente perdió el control del volante.
El levantamiento
Unidades de criminalística de carreteras llegaron casi una hora después del siniestro. Realizaron la inspección técnica del lugar, fijaron la escena y procedieron a recoger los restos carbonizados del conductor de la camioneta. Posteriormente, fueron trasladados al Instituto de Medicina Legal para la necropsia correspondiente y la plena identificación de la víctima.

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