Un viaje que empezó como retorno terminó con llantos en la carretera. Según el conductor, el campero se salió de la vía en plena curva y rod...
Un viaje que empezó como retorno terminó con llantos en la carretera. Según el conductor, el campero se salió de la vía en plena curva y rodó por un barranco en el sector La Cabaña. Siete personas, entre ellas cuatro menores, resultaron lesionadas.
¿Qué pasó?
El viernes 12 de septiembre, a las 5:30 de la tarde, en el kilómetro 17 de la vía nacional que conduce al corregimiento de Santa Cecilia, zona rural del municipio de Pueblo Rico, un campero Toyota Land Cruiser modelo 1961, placas KCI-176, color rojo, se salió en una curva y rodó al abismo.
Según el relato del conductor, Nayer Gutiérrez García, de 23 años y natural de la misma municipalidad, perdió el control y no pudo evitar que el vehículo se fuera cuesta abajo. En el campero viajaban seis miembros de la comunidad indígena Guayabal, quienes estaban retornando de Bogotá después de varios años de vivir en las calles del Parque Bolívar, donde se rebuscaban el día a día.
El retorno hacía parte de un acuerdo con la Agencia Nacional de Tierras y la Unidad de Víctimas, pero el sueño de regresar a su tierra terminó con un accidente que pudo costarles la vida.
Los lesionados
Entre ellos iba el conductor del campero y también resultaron heridos Eliza Tequia Natura de 62 años y Ramón Tascón Carrasco de 61, ambos naturales de Bagadó en el Chocó, además de cuatro menores, Ana Sofía Restrepo Mamundia de 2 años, Mary Jhoana Murri Síntua de 6, Juanita Mamundia Murri de 16 y Norbey Mamundia Murri de 12, este último con trauma craneoencefálico severo que obligó a remitirlo a la clínica NOE de Pereira.
El dictamen médico
De los siete ocupantes, solo uno fue remitido a centro especializado. Los demás fueron valorados y, según médicos de turno, no presentaban heridas de gravedad.
Dato
El accidente fue reportado por el hospital de Pueblo Rico, que alertó a las autoridades sobre el ingreso de los heridos. Bomberos y unidades de socorro atendieron la emergencia en la vía, mientras la Policía de carreteras recogía la versión del conductor para el informe oficial. El carro quedó destruido tras rodar por el barranco y quedó como testigo del regreso accidentado de la familia indígena.
¿Qué pasó?
El viernes 12 de septiembre, a las 5:30 de la tarde, en el kilómetro 17 de la vía nacional que conduce al corregimiento de Santa Cecilia, zona rural del municipio de Pueblo Rico, un campero Toyota Land Cruiser modelo 1961, placas KCI-176, color rojo, se salió en una curva y rodó al abismo.
Según el relato del conductor, Nayer Gutiérrez García, de 23 años y natural de la misma municipalidad, perdió el control y no pudo evitar que el vehículo se fuera cuesta abajo. En el campero viajaban seis miembros de la comunidad indígena Guayabal, quienes estaban retornando de Bogotá después de varios años de vivir en las calles del Parque Bolívar, donde se rebuscaban el día a día.
El retorno hacía parte de un acuerdo con la Agencia Nacional de Tierras y la Unidad de Víctimas, pero el sueño de regresar a su tierra terminó con un accidente que pudo costarles la vida.
Los lesionados
Entre ellos iba el conductor del campero y también resultaron heridos Eliza Tequia Natura de 62 años y Ramón Tascón Carrasco de 61, ambos naturales de Bagadó en el Chocó, además de cuatro menores, Ana Sofía Restrepo Mamundia de 2 años, Mary Jhoana Murri Síntua de 6, Juanita Mamundia Murri de 16 y Norbey Mamundia Murri de 12, este último con trauma craneoencefálico severo que obligó a remitirlo a la clínica NOE de Pereira.
El dictamen médico
De los siete ocupantes, solo uno fue remitido a centro especializado. Los demás fueron valorados y, según médicos de turno, no presentaban heridas de gravedad.
Dato
El accidente fue reportado por el hospital de Pueblo Rico, que alertó a las autoridades sobre el ingreso de los heridos. Bomberos y unidades de socorro atendieron la emergencia en la vía, mientras la Policía de carreteras recogía la versión del conductor para el informe oficial. El carro quedó destruido tras rodar por el barranco y quedó como testigo del regreso accidentado de la familia indígena.
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