A los asesinos no les tiembla la mano en el occidente de Risaralda. En el municipio La Celia la violencia volvió a rugir, un hombre fue caza...
A los asesinos no les tiembla la mano en el occidente de Risaralda. En el municipio La Celia la violencia volvió a rugir, un hombre fue cazado de madrugada en plena calle, alcanzó a pelearle unas horas a la muerte en un hospital, pero finalmente perdió el pulso. Su nombre ya estaba sonando hace rato en el bajo mundo, era casi que cuestión de tiempo para que terminara en una morgue.
¿Qué pasó?
Era la 1:25 de la madrugada de este domingo cuando en el barrio Dosquebradas, empezaron a escucharse varios disparos que despertaron a los vecinos. Estos llamaron despavoridos a la Policía y al llegar encontraron a un hombre tirado en el piso, con la cara bañada en sangre. Lo montaron en un vehículo y lo llevaron a urgencia del hospital local, pero sus heridas eran de muerte anunciada, fue remitido a Pereira y en el centro asistencial San Jorge, a las 5:30 de la mañana, confirmaron que ya no respiraba.
La víctima
Se trataba de Yonatan Alexis Flórez Calvo, de 25 años, natural de La Virginia. A pesar de su corta edad, ya era un reconocido actor criminal, fichado como uno de los principales dinamizadores del tráfico de estupefacientes en el municipio de La Celia, donde su nombre se escuchaba cada vez que había problemas de microtráfico.
Los disparos
Los sicarios no fallaron, dos tiros que le entraron por el mentón y salieron por la cabeza. Sin opción de sobrevivir.
Su prontuario
Flórez Calvo no era ningún santo. A la justicia ya le había pasado por las manos en innumerables ocasiones, porque además de haber sido capturado varias veces, acumulaba tres anotaciones por tráfico de estupefacientes, dos más por fuga de presos, otra por utilizar menores en sus vueltas y una última por entrenamiento para actividades ilícitas.
Pero no paraba ahí, porque también tenía encima seis comparendos del Código de Convivencia, en tres ocasiones lo pillaron desobedeciendo órdenes de la Policía, en otra lo sancionaron por andar con cuchillos y sustancias peligrosas, también lo reportaron por consumir y vender droga en plena vía pública, y hasta por irrespetar a los uniformados terminó multado.
El crimen
Primero llegaron las unidades de criminalística, acordonaron el sitio y recogieron las evidencias de la balacera. Más tarde, el CTI de Pereira se desplazó a la morgue del hospital San Jorge, donde realizaron la inspección técnica del cadáver. Finalmente, el cuerpo fue trasladado al Instituto de Medicina Legal para practicarle la necropsia de ley.
Así, La Celia suma otro nombre a la lista negra de la violencia. Un joven que apenas llegaba a los 25 y que terminó pagando con su vida la cuenta que ya le tenía escrita la calle.
¿Qué pasó?
Era la 1:25 de la madrugada de este domingo cuando en el barrio Dosquebradas, empezaron a escucharse varios disparos que despertaron a los vecinos. Estos llamaron despavoridos a la Policía y al llegar encontraron a un hombre tirado en el piso, con la cara bañada en sangre. Lo montaron en un vehículo y lo llevaron a urgencia del hospital local, pero sus heridas eran de muerte anunciada, fue remitido a Pereira y en el centro asistencial San Jorge, a las 5:30 de la mañana, confirmaron que ya no respiraba.
La víctima
Se trataba de Yonatan Alexis Flórez Calvo, de 25 años, natural de La Virginia. A pesar de su corta edad, ya era un reconocido actor criminal, fichado como uno de los principales dinamizadores del tráfico de estupefacientes en el municipio de La Celia, donde su nombre se escuchaba cada vez que había problemas de microtráfico.
Los disparos
Los sicarios no fallaron, dos tiros que le entraron por el mentón y salieron por la cabeza. Sin opción de sobrevivir.
Su prontuario
Flórez Calvo no era ningún santo. A la justicia ya le había pasado por las manos en innumerables ocasiones, porque además de haber sido capturado varias veces, acumulaba tres anotaciones por tráfico de estupefacientes, dos más por fuga de presos, otra por utilizar menores en sus vueltas y una última por entrenamiento para actividades ilícitas.
Pero no paraba ahí, porque también tenía encima seis comparendos del Código de Convivencia, en tres ocasiones lo pillaron desobedeciendo órdenes de la Policía, en otra lo sancionaron por andar con cuchillos y sustancias peligrosas, también lo reportaron por consumir y vender droga en plena vía pública, y hasta por irrespetar a los uniformados terminó multado.
El crimen
Primero llegaron las unidades de criminalística, acordonaron el sitio y recogieron las evidencias de la balacera. Más tarde, el CTI de Pereira se desplazó a la morgue del hospital San Jorge, donde realizaron la inspección técnica del cadáver. Finalmente, el cuerpo fue trasladado al Instituto de Medicina Legal para practicarle la necropsia de ley.
Así, La Celia suma otro nombre a la lista negra de la violencia. Un joven que apenas llegaba a los 25 y que terminó pagando con su vida la cuenta que ya le tenía escrita la calle.
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