Dicen que el que nada debe, nada teme… por eso este joven de 21 años caminaba nervioso por el callejón del barrio Brisas del Cauca, con una ...
Dicen que el que nada debe, nada teme… por eso este joven de 21 años caminaba nervioso por el callejón del barrio Brisas del Cauca, con una gorra color café encajada hasta las cejas y los bolsillos más pesados de lo normal. Eran las 7:40 de la noche cuando patrulleros de la subestación de Policía Caimalito decidieron hacerle el pare.
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Lo que parecía una requisa rutinaria terminó con esposas. Al muchacho le encontraron, bien guardada en el bolsillo derecho del yin, un paquete que contenía nada más y nada menos que perico bien empacado.
¿Quién es?
Se llama Hans Cristian Reaño Polanco, tiene 21 años, vive en el mismo barrio donde lo pescaron. Y aunque no llevaba ningún letrero que dijera 'vendo droga', lo que traía encima hablaba por sí solo. Lo subieron a la patrulla y fue llevado a la estación de Policía de La Virginia, donde quedó a disposición de la Fiscalía para su judicialización.
¿Y ahora qué?
El procedimiento quedó registrado, la droga incautada y el expediente abierto. Lo que no se sabe es si este será uno más de esos casos donde, a pesar de agarrarlo con las manos en la masa, el capturado termina en libertad mientras continúa vinculado al proceso. Ya veremos si también corre con esa suerte.
'No era cualquier vueltica'
La bolsita que llevaba Hans Cristian no era para consumo propio. Las 50 dosis de cocaína incautadas tienen un valor aproximado de 500 mil pesos.
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Lo que parecía una requisa rutinaria terminó con esposas. Al muchacho le encontraron, bien guardada en el bolsillo derecho del yin, un paquete que contenía nada más y nada menos que perico bien empacado.
¿Quién es?
Se llama Hans Cristian Reaño Polanco, tiene 21 años, vive en el mismo barrio donde lo pescaron. Y aunque no llevaba ningún letrero que dijera 'vendo droga', lo que traía encima hablaba por sí solo. Lo subieron a la patrulla y fue llevado a la estación de Policía de La Virginia, donde quedó a disposición de la Fiscalía para su judicialización.
¿Y ahora qué?
El procedimiento quedó registrado, la droga incautada y el expediente abierto. Lo que no se sabe es si este será uno más de esos casos donde, a pesar de agarrarlo con las manos en la masa, el capturado termina en libertad mientras continúa vinculado al proceso. Ya veremos si también corre con esa suerte.
'No era cualquier vueltica'
La bolsita que llevaba Hans Cristian no era para consumo propio. Las 50 dosis de cocaína incautadas tienen un valor aproximado de 500 mil pesos.
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